Tomàs Ripoll es el director del Programa de estudio de la muerte súbita cardíaca en las Islas (MUSIB) y director de la Unidad de Cardiopatías Familiares de Son Llàtzer. Advierte de la necesidad de formar a la sociedad en técnicas de reanimación cardiopulmonar y dotar de desfibriladores los espacios públicos.