Un año más, la oferta de series ha desbordado las expectativas y ofrecido estímulos de muchas clases desde los más diversos géneros (a menudo mezclados), tonos y formatos. El número uno parecía inevitable: además de una exhibición técnico-artística, es una necesaria llamada a la acción. Por debajo, ciencia ficción de variadas ambiciones, dramas criminales resonantes o la serie de hospital de la que todo el mundo está hablando.