La pulsión del miedo

Ante el abismo, un miedo que son muchos nos empuja a dar un paso al frente. Vamos a caer y en ese fatídico desplome se van a estampar tantos derechos largamente luchados y ganados. Se derrumbará el bienestar alcanzado (siempre insuficiente, pero indudablemente notable). Y perderemos la humanidad. Esa que nos permite mirarnos a los ojos y reconocernos. Esa que niega la violencia como principal lenguaje común. Esa que nos impide convertirnos en alimañas al servicio de los depredadores.