El deporte brasileño atraviesa horas de profunda tristeza por la muerte de Isabelle Marciniak, una gimnasta rítmica que se había ganado un lugar entre las grandes proyecciones de la disciplina. Tenía 18 años y luchaba contra un linfoma de Hodgkin, una enfermedad que la obligó a

El deporte brasileño atraviesa horas de profunda tristeza por la muerte de Isabelle Marciniak, una gimnasta rítmica que se había ganado un lugar entre las grandes proyecciones de la disciplina. Tenía 18 años y luchaba contra un linfoma de Hodgkin, una enfermedad que la obligó a