El Ayuntamiento de Lorca ha iniciado las obras de ampliación y mejora del Camino de la Ribera de San Miguel, junto al río Guadalentín. Con una inversión de 70.000 euros procedentes íntegramente de fondos municipales, la actuación busca mejorar la seguridad, la movilidad y la accesibilidad en esta vía tan transitada. Las obras, que se prolongarán durante dos semanas, incluyen el asfaltado de la calzada para habilitar dos carriles de circulación, uno por sentido. Además, se construirá una acera peatonal de tres metros de ancho y una banda de aparcamiento para garantizar la seguridad tanto del tráfico como de los viandantes en un tramo de medio kilómetro. La portavoz del Gobierno municipal, Rosa Medina, ha justificado la intervención por la alta densidad de tráfico que soporta el camino, a pesar de ser una vía secundaria. Medina ha explicado que la Ribera de San Miguel es un espacio "muy transitado por deportistas que hacen ejercicio junto al río y por cofrades del Paso Encarnado y del Paso Blanco". Hasta ahora, la carretera era tan estrecha que no podían cruzarse dos vehículos, lo que generaba constantes problemas de movilidad. La ampliación ha sido posible tras la expropiación de terrenos a seis propietarios para poder ensanchar la vía hasta los siete metros. Estos terrenos ya estaban calificados como sistema general viario en el plan urbano de 2003. Dicho plan también contempla la construcción de un nuevo puente sobre el río Guadalentín para conectar con la carretera C-15, completando así la ordenación de la zona.