Papá Noel ya ha repartido sus regalos, pero todavía quedan los de Reyes Magos . Con motivo de esta nueva visita, los pedidos online siguen disparados y los móviles no dejan de recibir avisos sobre paquetes pendientes de envío o recogida. En este contexto, los ciberdelincuentes aprovechan para colar estafas cada vez más sofisticadas y creíbles. Ante el crecimiento de estos delitos durante las campañas navideñas, la Guardia Civil lanza siempre avisos a la ciudadanía para que eviten ser víctimas de ellos. «Si estás esperando un pedido con algún regalo para Navidades o Reyes… ¡cuidado!», reza la última advertencia del instituto armado en su canal de WhatsApp. La estafa descrita en este comunicado se basa principalmente en la suplantación de identidad de empresas de paquetería de confianza para realizar cargos ilegales. «Te piden una pequeña cantidad como gastos de entrega pero posteriormente el cobro es mucho más elevado», explica. Otra técnica sobre la que advierte la Guardia Civil es la de alegar supuestos inconvenientes en la entrega de un envío. En este caso, los delincuenten tratan de obtener información sensible sobre sus víctimas. El proceso arranca con la llegada de un SMS al teléfono móvil que suele incluir el siguiente aviso: « La entrega se ha suspendido porque su pedido no tiene numero de casa . Revise y complete los datos de su domicilio lo antes». Junto al mensaje aparece un enlace que dirige a una web donde se solicita introducir datos personales en distintos campos. «No piques, su objetivo es que accedas al enlace y recabar tus datos personales y bancarios», aconseja la Guardia Civil. Las estafas digitales presentan patrones comunes que permiten identificarlas incluso sin conocimientos avanzados de ciberseguridad. Solo hay que prestar atención a cada detalle. Uno de los indicios más evidentes es la urgencia . Los delincuentes buscan que la víctima actúe sin pensar, advirtiendo de supuestas consecuencias graves si no se responde de inmediato. También son frecuentes las pequeñas inconsistencias en el remitente o en los enlaces, como direcciones web alteradas mínimamente para parecer legítimas. Otro elemento clave es la solicitud de información sensible . Ninguna organización seria pedirá contraseñas, PIN o credenciales completas por SMS, correo o teléfono, por lo que cualquier petición de este tipo suele ser señal de estafa. Si la estafa ya se ha producido, actuar rápido es fundamental. Lo que hay que hacer es contactar con el banco para bloquear el método de pago, recopilar pruebas, denunciar y cambiar contraseñas si se han compartido datos. La recuperación del dinero dependerá del sistema de pago utilizado.