La Policía Nacional detuvo este pasado lunes en Toledo a un varón de 52 años de edad, morador del inmueble en el que se originaron las llamas , como presunto autor del incendio provocado que tuvo lugar el pasado 2 de diciembre y que afectó al edificio situado en el número 3 de la avenida de Portugal , en el barrio de Buenavista. Los hechos se desarrollaron durante la mañana del 2 de diciembre , sobre las 09:00 horas, cuando se recibieron varios avisos a través del 091 alertando de que se había producido una explosión en una vivienda del barrio de Buenavista, de la que salían llamas. De manera inmediata, se personaron en el lugar varias patrullas de la Policía Nacional, que comprobaron que salían llamas y una gran cantidad de humo de una vivienda situada en el primer piso. Los agentes organizaron rápidamente un dispositivo de seguridad para evitar más accidentes y asegurar la integridad física de los vecinos que aún se encontraban dentro del edificio. De manera coordinada, y con la ayuda de dos ciudadanos que se acercaron hasta el lugar, evacuaron a la mayor parte de los vecinos, incluido el morador de la vivienda . A pesar de la gravedad del incendio, que resultaba especialmente resistente, únicamente resultaron afectadas por inhalación de humo nueve personas , entre ellas el morador de la vivienda, un vecino de 91 años de edad, cinco miembros de una misma familia que permanecieron recluidos en el último piso hasta que se lograron las condiciones óptimas para que pudieran ser evacuados sin riesgo, y los dos policías nacionales que fueron los primeros en acceder al inmueble para auxiliar a los vecinos. Además de las patrullas de la Brigada de Seguridad Ciudadana, también se desplazaron hasta el lugar agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de Toledo, así como investigadores de Policía Judicial y especialistas en incendios de la Brigada de Policía Científica, que abrieron ya in situ una investigación para esclarecer el origen y las circunstancias del incidente. Tras semanas de análisis y entrevistas a vecinos y testigos, la Policía Nacional logró recabar diversas pruebas e indicios claros que apuntaban a un incendio provocado , determinando también la identidad del presunto autor de los hechos, que resultó ser el morador de la vivienda en la que se originó el fuego, y fue detenido este lunes por la Policía Nacional. Los operadores del Centro Inteligente de Coordinación Mando y Control (CIMACC) de la Policía Nacional, fueron los primeros agentes en poner en marcha el dispositivo de seguridad que permitió operar con rapidez en el incendio. A los pocos minutos de producirse la explosión que dio origen al incendio, uno de los alertantes, vecino del último piso del edificio, llamó al 091 solicitando ayuda a los agentes ya que se encontraba encerrado en el piso junto con su familia, entre ellos dos menores de muy corta edad. Desde ese momento, una agente de la Policía Nacional permaneció al habla con ellos dándoles indicaciones para mantenerse seguros y evitar que les afectase la inhalación de humo, informándoles de cómo se desarrollaba toda la actuación y tranquilizándoles hasta que se dieran las condiciones óptimas para que pudieran ser rescatados. A la par, este vecino fue facilitando información sobre todos y cada uno de los habitantes de las viviendas del edifico, información que fue a su vez transmitida desde la sala CIMACC al resto de patrullas y a los Bomberos, facilitando así la localización de todas las posibles personas afectadas. La comunicación de estos vecinos con la agente de la Policía Nacional fue permanente, hasta que pudieron ser evacuados por los Bomberos pasadas las doce de la mañana .