Lo bueno de tener a Hakuna en Madrid es que el resto de ciudades nos libramos del marrón. A no ser que sean como Boney M, claro, marca bajo la que se escondían varias formaciones que tocaban simultáneamente los mismos temas en diferentes escenarios de Europa. Pero Hakuna , como España, no hay más que una. Y, como decía El Perich, eso es algo que el resto de países nunca nos han sabido agradecer lo suficiente. Yo habría preferido a Joaquín Sabina cantando villancicos, una cosa más española y más tradicional, algo parecido a lo que hizo Bob Dylan en aquel álbum, 'Christmas In The Heart' . Y tiene su mérito porque Dylan es de origen judío. Pero, como él... Ver Más