La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Navarra confirmó la sentencia a un varón, de nacionalidad española y sin antecedentes penales, al que el Juzgado de lo Penal Nº2 de Pamplona condenó a pagar una multa de 1.080 euros y al pago de las costas procesales por haber cometido un delito de resistencia y desobediencia grave a la autoridad tras forcejear con la policía al negarse a llevarse a sus tres perros, que generaban molestias en la calle. Mientras ello se producía, el acusado almorzaba en un bar próximo y luego se negó a mostrar su documentación a los agentes.