La escena es conocida por varias generaciones, pero ahora se repite fuera de la ficción. En las sierras del interior de la provincia de Alicante comienzan a detectarse crías de ciervo de apenas unos meses de edad vagando solas, sin rastro de sus madres. La Asociación Defensa de Herbívoros contra Incendios Forestales (Adhif) vincula esta situación a la aplicación del nuevo decreto de caza del Consell que amplía el control cinegético a todos los ungulados silvestres. Por ello, han decidido llevar la norma ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV).