El futuro de los edificios de Santa Clara, en vilo a la espera de un informe técnico clave: "Esperamos en enero conocer el estado concreto de los pilares, sus patologías y metodologías para repararlos"

Las labores de apuntalamiento en los edificios 2, 3 y 4 de la plaza Santa Clara de Huesca están a punto de concluir. Esta fase es crucial para poder determinar con exactitud los daños estructurales que sufren los inmuebles, después de que fueran desalojados el pasado mes de noviembre por un grave riesgo de colapso. La finalización de estos trabajos preliminares permitirá a los técnicos realizar un diagnóstico preciso y definir la metodología a seguir para la reparación definitiva de los pilares afectados, un proceso que mantiene en vilo a decenas de familias. La alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, ha informado sobre el estado de la situación, matizando el papel del consistorio en esta crisis. Orduna ha dejado claro que la obra no está dirigida por el Ayuntamiento, ya que se trata de propiedades particulares. No obstante, ha asegurado que el ejecutivo municipal se mantiene constantemente informado sobre cada avance. “Debe de faltar muy poco por apuntalar y una vez se termine, se analizará más detalladamente el estado de todos los pilares”, ha señalado la alcaldesa. Una vez finalice por completo el apuntalamiento, los técnicos podrán acceder con seguridad al interior de los edificios para evaluar la magnitud real de las deficiencias. “Esperamos que la parte técnica nos diga en qué situación están esos pilares, cuántos son, si hay otras patologías, aunque se entiende que no, y ver la metodología para reparar”, ha insistido Orduna. El mes de enero se perfila como una fecha clave para conocer nuevos detalles, a pesar de las complicaciones que suponen las festividades navideñas en el calendario de trabajo. La alcaldesa ha expresado su confianza en la diligencia de los profesionales implicados. “La parte técnica está trabajando con toda la celeridad posible y creo que en enero podremos saber algo más, teniendo en cuenta que estas son malas fechas, pero creo que tras apuntalar se podrán confirmar las patologías y se podrán ver las posibles soluciones”, ha comentado. Esta evaluación es el paso indispensable para que la comunidad de propietarios pueda iniciar el camino hacia la rehabilitación de sus hogares. Mientras la solución técnica llega, la realidad para muchos vecinos es que el regreso a casa todavía tardará meses. A diferencia de los residentes del bloque 1, que pudieron volver a sus viviendas para celebrar la Navidad, los de los bloques 2, 3 y 4 afrontan una larga espera. Actualmente, un total de 75 personas continúan realojadas por el Ayuntamiento de Huesca, que se ha hecho cargo de su situación desde el primer momento. La cifra inicial era de 105 afectados, pero se ha ido reduciendo conforme algunas familias han encontrado alternativas. El compromiso municipal con los afectados es firme. Lorena Orduna ha garantizado que el apoyo se mantendrá todo el tiempo que sea necesario. “Empezamos con 105 personas y ahora son 75 los realojados y se seguirá realojando a quien tenga necesidad, además de que siguen utilizando el servicio de comedor”, ha afirmado la alcaldesa, subrayando la continuidad de la asistencia para cubrir las necesidades básicas de los damnificados. En paralelo, el Ayuntamiento de Huesca prepara la aprobación de su presupuesto municipal, que incluye una partida específica para los afectados de Santa Clara. El pleno, que se celebrará el próximo 7 de enero, votará unas cuentas que contemplan una ayuda inicial de 333.000 euros, una cifra que, según se ha indicado, será ampliable en función de las necesidades que surjan durante el proceso de reparación. Este apoyo financiero será fundamental para que los vecinos puedan hacer frente a las costosas obras de rehabilitación estructural que tienen por delante.