Sanidad da el primer paso para limitar las horas de trabajo de los MIR en plena disputa por el Estatuto Marco

El Ministerio de Sanidad quiere limitar las horas que trabajan los profesionales en formación sanitaria especializada, es decir, los residentes de Medicina (MIR) o Enfermería (EIR), entre otros. El departamento de Mónica García asegura que en la actualidad las jornadas de los residentes superan en muchas ocasiones los límites de horas de trabajo que establece Europa. Y la normativa española actual, dice el ministerio, no es suficiente para velar por el cumplimiento de esos máximos de jornada laboral. Pero los MIR consideran que el momento elegido no es el apropiado, con la profesión médica en contra de la ministra por su propuesta de Estatuto Marco . Sanidad ha sacado este lunes a consulta pública la modificación del real decreto que regula las condiciones laborales de los residentes. El objetivo, asegura el ministerio en una nota, es evitar que los MIR superen los límites máximos de jornada establecidos. Desde que se aprobó la norma en 2006, apunta, se han hecho modificaciones para cambiar aspectos concretos, pero «no se han llevado a cabo cambios sustantivos en lo relacionado con la duración y organización de la jornada laboral, especialmente en lo relacionado con las horas de guardia». En esta línea, afirma Sanidad, el ministerio trabaja actualmente en la reforma del Estatuto Marco, en la que plantea la supresión de las guardias de 24 horas y su reducción a 17. La intención es que este cambio en las condiciones se aplique también a los MIR a través de la modificación del real decreto. Sin embargo, los médicos alegan que la propuesta de Estatuto Marco de Mónica García mantiene la coletilla de que las guardias puedan seguir siendo de 24 horas por necesidades del servicio, por lo que defienden que esa reducción no será efectiva. Y los MIR, aunque comparten la necesidad de modificar el decreto que regula sus condiciones, creen que el momento que ha elegido el ministerio para hacerlo no podría ser más desafortunado. «Creemos que se están abriendo muchos frentes a la vez en un momento en el que los médicos estamos muy descontentos con el ministerio. Hay muchos problemas como con el Estatuto Marco o con el examen MIR. Y querer abrir ahora este tema nos parece inoportuno», lamenta Daniel Selva, secretario general de la Asociación MIR España (AME). Las fechas en las que Sanidad saca esta consulta pública, critica este representante de los médicos residentes, tampoco son a su juicio las adecuadas, pues el plazo para que ciudadanos, organizaciones y asociaciones envíen las aportaciones que el ministerio valorará para elaborar el texto comienza este 30 de diciembre y finalizará el 13 de enero, es decir, en plenas fiestas. «Nos parece que se está haciendo de forma muy precipitada», asevera Selva. El ministerio, por su parte, defiende que con la reforma de este real decreto se establecerá una jornada laboral que permita a los especialistas en formación compaginar su derecho al descanso con las competencias que deben adquirir durante los años de residencia. Coincide en esto el departamento de Mónica García con los MIR, que también lo ven necesario, pero consideran que se debe ir más allá: «Creemos que es necesaria una modificación mucho más profunda en la que además de la jornada laboral y las guardias se aborden otros temas como el retributivo. El real decreto debería fijar un mínimo de salario base para todos los residentes más alto de que hay actualmente y que sea homogéneo en todas las comunidades autónomas», prosigue el secretario general de AME. Ahora, prosigue, hay residentes que, sin guardias, cobran el salario mínimo interprofesional pese a la «responsabilidad» que supone su trabajo, por lo que defienden que el ministerio fije unos mínimos. Lo primero que debería hacer el ministerio, continúa Selva, es sentarse a negociar con los médicos sus condiciones laborales, «con una propuesta que nos resulte creíble». «Querer modificar ahora este real decreto cuando no hay consenso para un Estatuto Marco nos parece que es hacer las formas de forma precipitada y no adecuada», concluye.