Una experta desvela por qué se rompen más parejas en Navidad y verano

Las épocas de Navidad y verano se han convertido en un punto de inflexión para muchas parejas. Lejos de ser un tiempo de unión, el aumento de la convivencia saca a la luz problemas latentes que acaban en ruptura. Así lo ha explicado la coach y mentora de relaciones Elsa Debra, de ‘El Código del Amor’, en los micrófonos de Mediodía COPE Alicante, donde ha analizado por qué muchas relaciones no sobreviven a las vacaciones. Según la experta, el principal detonante es que durante las vacaciones "pasamos más tiempo juntos". La rutina diaria, con el trabajo, los niños y otras obligaciones, funciona como un mecanismo para "distraernos mucho" de los problemas de fondo. Sin embargo, cuando esas distracciones desaparecen, "sí o sí sale, porque no se puede esconder", afirma Debra. La convivencia intensiva obliga a enfrentar una realidad que muchos prefieren ignorar. El verdadero problema, sin embargo, no es el tiempo compartido, sino lo que se hace con él. La mentora señala que las parejas de hoy se quejan mucho, pero se comunican poco y mal. "Nos hemos acostumbrado a sentarnos para culparnos", lamenta. Esta dinámica de echarle la culpa al otro es, para Debra, la principal causa de la desconexión entre hombres y mujeres, una costumbre que impide resolver los conflictos de raíz. Frente a la tendencia de culpar al otro, la experta propone un ejercicio de autocrítica y humildad. La clave, asegura, es "mirarse en el espejo" y preguntarse: "¿qué puedo mejorar yo?". Este cambio de enfoque es fundamental, ya que "si tú permites algo, tienes la responsabilidad y lo puedes cambiar". Aconseja preguntar directamente a la pareja qué se puede mejorar, un gesto que requiere dejar el orgullo a un lado para lograr una comunicación honesta. Otro de los errores más comunes es acumular el malestar y actuar como si no pasara nada por miedo a la soledad o al conflicto. "Esa es la razón por la que la mayoría de las relaciones fracasan", advierte Debra. Este comportamiento, sostenido en el tiempo, genera un desgaste emocional tan grande que, cuando la persona explota, el rencor acumulado hace casi imposible recuperar la relación. Por ello, es vital poner límites y comunicar el malestar de forma asertiva. Debra también alerta sobre los peligros de la comunicación por WhatsApp, donde "el 93 % de la comunicación se pierde". Esto provoca constantes malentendidos, ya que la mente "se inventa" el tono y la intención del mensaje. Por otro lado, observa una brecha generacional: mientras las generaciones anteriores aguantaban más, los jóvenes son más drásticos y optan por la ruptura a la mínima, pasando "de un extremo a otro". Como consejo para estas Navidades, la mentora recomienda observarse a uno mismo, analizar las creencias aprendidas y cambiar el diálogo interno. "Si yo cambio, todo va a cambiar", insiste. Se trata de un primer paso que puede generar "un cambio brutal" y salvar la relación antes de que el desgaste sea irreversible, una de las misiones que persiguen desde su proyecto online El Código del Amor.