El mundo del cine llora la muerte de una de las estrellas del cine francés, Brigitte Bardot que falleció este domingo a sus 91 años. Su marcha ha invitado a revisar su filmografía que cuenta con títulos destacados que se estrenaron con « un éxito escandaloso en Nueva York, Berlín o Londres » como 'Le Mépris' (El desprecio); 'Y Dios creó a la mujer' (Et Dieu créa la femme) o 'Histoires extraordinaires' (Historias extraordinarias). Uno de sus trabajos le permitió viajar hasta Sevilla , 'La femme et le Pantin' (1959). Dirigida por el francés Julien Duvivier, Bardot encarnó a Eva Marchand la mujer con la que el protagonista del film, Matteo Diaz (Antonio Vilar), sucumbió a sus deseos ya que su esposa era incapaz de satisfacerlos. Durante la primavera de 1958 , cuando Bardot tenía 24 años, el equipo se trasladó a la capital hispalense para filmar en lugares como la Feria del Prado, la Plaza de Doña Elvira, el barrio de Santa Cruz, el Alcázar o la Plaza de España , que fueron testigos de la belleza de uno de los mitos nacionales de Francia. La actriz no dejó pasar la oportunidad de pisar el Real de la feria y atrajó todas las miradas de los sevillanos. De ese momento, solo quedan las imágenes y recortes en prensa que desvelan el intento de Bardot de llevar el compás , así como su paso por uno de los puestos típicos de churros de la feria . El tránsito de esta mujer 'libre' y 'deseada' con su cabello rubio suelto por la feria de abril apenas fue comentado en la prensa española debido a la situación política que vivía el país entonces bajo la dictadura franquista. Pero, los medios internacionales sí hicieron eco de su paso, la revista 'París Match' publicó en portada una imagen de Brigitte vestida de flamenca, mientras que en sus páginas interiores mostraron a Bardot dando palmas en una caseta del Real. Entonces, aquellas fotografías contribuyeron a la creación en el imaginario europeo una 'idea sensual del sur de España'. Después de participar en casi 50 películas, Bardot se retiró de los focos en 1973 , cuando tenía 39 años para defender grandes causas como el ecologismo, la defensa de los animales o las grandes campañas ante los sucesivos jefes de estado. Así, hace unos años declaró a este periódico : « consagré mi juventud a los hombres. He consagrado mi vejez a la defensa de los animales ».