Nunca pensaron los vecinos de Villamanín que la suerte del ‘Gordo’ de Navidad acabaría convirtiéndose, en cuestión de días, en un grave conflicto de convivencia en este pequeño pueblo de la montaña leonesa. La felicidad inicial dio paso a la tensión tras conocerse el error de la comisión de fiestas, que vendió más participaciones de las que estaban respaldadas por décimos jugados.