Compararse es una tontería autodestructiva incluso para quien sale ganando. Por pensar mal, a saber por qué necesitará alzarse con el triunfo quien sabiéndose en esa posición inicia el mecanismo, más o menos sutil, para que se le reconozca, al menos mediante la evidencia. ¿Narcisismo? ¿Inseguridad? ¿Revancha? ¿Falta de empatía? ¿Ganas de bronca? ¿Desconocimiento de la variedad de recorridos, decisiones, suertes, empeños, gustos? ¿Estrechez de miras? ¿Réplica inconsciente de modos aprendidos?