2025 ha sido un año prolífico en errores de comunicación política. Voy a señalar cuatro muy significativos. El primero de ellos llegó de la mano del presidente de Colombia, Gustavo Petro, el pasado mes de enero. Tras unas incendiarias declaraciones del inquilino republicano de la Casa Blanca, Donald Trump, sobre deportaciones masivas de inmigrantes latinoamericanos y subidas de aranceles a diestro y siniestro, Petro, en las antípodas ideológicas del norteamericano, se enfrentó con su homólogo estadounidense a golpe de iracundos mensajes en las redes sociales.