La Consejería de Sanidad del Gobierno de Castilla-La Mancha ha adjudicado ya el programa de detección precoz de cáncer de mama en el Área Sanitaria de Talavera de la Reina para el periodo 2026-2028, después de cinco meses con el servicio suspendido tras el cierre repentino del Centro de Diagnóstico Médico, empresa que venía prestándolo desde al menos el año 2013. La nueva contratación llega tras meses de críticas por el impacto que la interrupción del programa tuvo en miles de mujeres , que vieron retrasadas o directamente anuladas sus mamografías. La Consejería de Sanidad ha resuelto el contrato a favor de Extremeña de Gestión Sanitaria y Especialidades Médicas, es decir, Hospital Parque Marazuela , frente a la oferta presentada por el Grupo Quirón. El precio unitario se ha fijado en 33,95 euros por mamografía, exento de IVA, y un importe máximo total de 1,22 millones de euros para la realización de 36.000 pruebas en tres años. En esta nueva licitación, el Gobierno del socialista Emiliano García-Page ha elevado el precio unitario respecto a la adjudicación anterior, cuando apostó por mamografías 'low cost' a 22 euros , una oferta que la propia mesa de contratación llegó a considerar de baja temeraria. Hospital Parque Marazuela, como recoge su oferta, se compromete a incorporar dos equipos adicionales de diagnóstico por imagen, una unidad fija más y a reducir en cinco días el plazo máximo de comunicación de resultados , mientras que la oferta de Quirón, con un precio de 37 euros por prueba, planteaba menos recursos adicionales y una reducción de solo dos días en los tiempos para informar y comunicar los resultados. La adjudicación se produce tras una crisis sin precedentes en el programa de prevención en el área sanitaria de Talavera, provocada por el cierre inesperado de la clínica adjudicataria, que cerró sus puertas a finales de mayo. Hasta octubre, el Gobierno de García-Page no reaccionó , fue entonces cuando se activó un plan alternativo para cumplir el compromiso de que antes de que finalizase el año 2025 todas las pacientes a las que les tocaba realizarse las pruebas contarían con ellas, habilitándose citas tanto en el Hospital General Universitario Virgen del Prado, como en centro privados de diagnóstico de imagen del Grupo Quirón. A días de que finalice el año, el nuevo contrato trata de cerrar un episodio que ha trastocado la confianza en el sistema sanitario con una respuesta institucional que llegó cuando el problema ya era estructural y tras saltar a los medios la grave situación de los cribados de cáncer del Partido Popular en la Junta de Andalucía.