La ciudad de Guadix ha cerrado el año 2025 como uno de los pocos municipios de la provincia de Granada que ha crecido en población, un logro que el equipo de gobierno atribuye a una gestión enfocada en la creación de oportunidades. Para continuar esta senda, el Ayuntamiento ha aprobado el presupuesto municipal para 2026, que asciende a 20,15 millones de euros y que, según el alcalde, Jesús Lorente, parte de una situación financiera sólida con deuda cero. El presupuesto para 2026 contempla casi 7 millones de euros en inversiones, lo que representa más de un 30% del total. Lorente ha destacado también la eficiencia en la gestión económica, subrayando que el consistorio mantiene un plazo medio de pago a proveedores de 15 a 20 días, un factor que, asegura, "ayuda a todo el tejido productivo de la ciudad". En este sentido, el alcalde ha anunciado que se está trabajando en dos proyectos importantísimos que podrían transformar el futuro económico accitano. Se trata de una actuación en el polígono industrial Príncipe Felipe y otra en una nueva área de desarrollo comercial. "Si estos proyectos salen, va a ser un revulsivo muy importante para la ciudad", ha afirmado Lorente, quien espera firmar el convenio de uno de ellos en enero. La puesta en valor del patrimonio es otro de los ejes estratégicos. El alcalde ha agradecido a la Diputación de Granada la compra del convento de la Concepción, donde se ubicará un museo cofrade, y del castillo de la Calahorra. A esto se suman las intervenciones en el teatro romano, la alcazaba y un proyecto "muy ilusionante" en los refugios de la Guerra Civil. Para superar la escasez de personal y hacer visitable esta riqueza, el Ayuntamiento ha iniciado un procedimiento de gestión indirecta de los recursos patrimoniales que espera resolver en el primer trimestre de 2026. Según el alcalde, Guadix es "la gran desconocida de la provincia", pues muchos visitantes reconocen al llegar: "no sabíamos de la riqueza que tenía Guadix". Finalmente, el alcalde ha reafirmado su compromiso con la reapertura de la línea ferroviaria Guadix-Baza, cerrada en 1985. Lorente ha criticado la "cerrazón" del gobierno de España, que alude a la falta de viabilidad económica, y ha defendido que el tren es un transporte eficiente y respetuoso con el medio ambiente clave para la conexión con el Levante y para sectores como el del mármol. La reivindicación continuará con una concentración el 31 de diciembre.