Cinco películas imprescindibles para recordar a Brigitte Bardot

Ante la muerte de la actriz Brigitte Bardot a la edad de 91 años este pasado domingo, muchos han querido recordar a la intérprete por su importante rol en el cine europeo de las décadas de los 50 y 60, que, en combinación de su icónico estilo, le sirvió para hacerse un hueco en la gran pantalla, así como en el recuerdo de muchos y muchas espectadoras que rememoran sus papeles fundamentales. Es por ello que repasamos cinco títulos imprescindibles de la trayectoria de la francesa en el cine. Y Dios creó a la mujer (1956) Dirigida por Roger Vadim, esta película marcó un antes y un después tanto en la carrera de Brigitte Bardot como en la representación de la mujer en el cine europeo. Su interpretación de Juliette Hardy, una joven huérfana que vive en Saint-Tropez guiada por su instinto y su deseo, rompió con los códigos morales dominantes de la época. La libertad sexual del personaje escandalizó a buena parte del público, pero también convirtió a Bardot en un fenómeno global. En 1956, mostrar a una mujer que no se disculpa por su forma de amar era un gesto del todo radical, y la película lo convirtió en su propia imagen, llamando a una nueva moral que marcaba una época. El desprecio (1963) En manos de Jean-Luc Godard, Bardot se alejó del arquetipo explosivo que la había hecho famosa para encarnar a Camille, una mujer atrapada en la lenta descomposición de su matrimonio. La película, una de las cumbres de la nouvelle vague, utiliza esa relación quebrada para reflexionar sobre el cine, el dinero, el poder y la traición emocional. Bardot se mueve aquí en un registro contenido y melancólico, integrada en un dispositivo cinematográfico que cuestiona tanto la industria como los afectos, sin renunciar a su presencia icónica. La verdad (1960) Bajo la dirección de Henri-Georges Clouzot, Bardot ofreció una de las interpretaciones más complejas de su carrera. Da vida a Dominique Marceau, una joven juzgada por asesinato, aunque el proceso judicial pronto se transforma en un examen moral de su vida privada. La película pone en evidencia cómo la sociedad castiga a la protagonista no solo por el delito del que se la acusa, sino por su independencia sentimental y sexual. Lejos del estereotipo, Bardot encarna aquí a una mujer expuesta al escrutinio público por salirse de la norma. ¡Viva María! (1965) Esta aventura dirigida por Louis Malle reúne a Bardot con Jeanne Moreau en una historia que mezcla comedia, revolución y sátira política. Bardot interpreta a una artista de cabaret que acaba implicada en un levantamiento armado en América Latina. El filme juega con el tono ligero sin renunciar a un espíritu libertario y fue un éxito internacional. Su impacto se reflejó también en el reconocimiento crítico, con una nominación al BAFTA como mejor actriz extranjera. 'Una vida privada' (1962) En este drama dirigido por Louis Malle, Bardot encarna a Valentine, una mujer que intenta equilibrar su vida profesional y personal mientras enfrenta conflictos...