El malestar va en aumento en las filas de Sumar por la falta de medidas en materia de vivienda. Una sensación que lleva meses instalada pero que se acentúa estos días, después de que el ala socialista del Gobierno haya desoído la petición del socio minoritario de prorrogar 600.000 contratos de alquiler que están a punto de vencer y cuya renovación prevé incrementar notablemente los precios. Un motivo que ha llevado a un diputado del grupo parlamentario de Sumar, Alberto Ibáñez, a pedir abiertamente el "cese" de la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, como un deseo en su carta a los Reyes Magos.