El FBI descubre que un ex atleta olímpico guardaba motos de Márquez, Rossi o Lorenzo valoradas en 32 millones

Autoridades mexicanas, en una operación conjunta con el FBI, la Policía Montada de Canadá y la policía de Los Ángeles, han desmantelado una de las colecciones de motociclismo privado más asombrosas descubiertas recientemente. Se trata de un lote de casi 50 motos de competición, cuyo valor estimado asciende a unos 34 millones de euros. La colección ha sido vinculada a Ryan James Wedding, un exatleta olímpico canadiense que figura entre los diez fugitivos más buscados por el FBI. Sobre él pesa una recompensa de hasta 15 millones de dólares por información que lleve a su captura, según ha confirmado la propia agencia estadounidense. Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Wedding está acusado de dirigir un cártel de la droga y de su presunta implicación en el asesinato de un testigo. Entre los cargos se incluyen conspiración para distribuir cocaína, blanqueo de capitales y manipulación de testigos en el marco de una organización criminal. El garaje donde se almacenaban las motos sin un cuidado especial contenía auténticas reliquias del motociclismo mundial. Entre las piezas incautadas se encuentran varias Ducati de MotoGP que fueron pilotadas por leyendas como Valentino Rossi y Jorge Lorenzo, además de otras conducidas por Andrea Dovizioso, Loris Capirossi y Andrea Iannone. Completan el hallazgo la Moto2 con la que Marc Márquez se proclamó campeón del mundo en 2012 y una Aprilia de 125 cc con la que Rossi ganó el título en la categoría del octavo de litro. El hallazgo ha sorprendido a los expertos del sector por el increíble valor histórico del conjunto. Este descubrimiento ha puesto de manifiesto la existencia de un mercado negro de memorabilia de competición que opera al margen de los canales oficiales. Aunque fabricantes como Ducati y la propia organización de MotoGP gestionan ventas de material original, las cifras no suelen alcanzar los niveles de la Fórmula 1.