El aviso al 112 llegó pasada las 11.00 horas del martes. Un hombre acababa de quedar sepultado bajo unos tres metros de tierra y escombros tras derrumbarse una estructura en la que trabajaba junto a unos compañeros en la calle Murillo, localizada en el barrio veleño de El Capitán. El servicio de emergencias activó al Consorcio Provincial de Bomberos, Policía Local, sanitarios y Policía Nacional. Dos patrulleros de este último cuerpo fueron los primeros en llegar al lugar del accidente y, junto a un compañero de la víctima, comenzaron a cavar con sus propias manos en el punto donde intuían que podría estar la cabeza del trabajador.