Mientras la mayoría de los ciudadanos se prepara para celebrar la Nochevieja, un dispositivo de abogados del turno de oficio permanece de guardia para garantizar la asistencia jurídica en el partido judicial de Cartagena. Este servicio, que funciona las 24 horas del día, no distingue entre festivos y días laborables, asegurando que cualquier detenido o víctima reciba la atención necesaria. Así lo ha explicado José Manuel Cubillas, diputado segundo y responsable del turno de oficio en Cartagena. El Colegio de Abogados de Cartagena mantiene un operativo idéntico al de cualquier otro día del año. Según Cubillas, el dispositivo incluye a un titular y un suplente para el turno penal general, y otros dos letrados para los juicios rápidos. Además, se cuenta con un turno específico para presuntos agresores de violencia de género, también con dos abogados, y otro para la asistencia a las víctimas de esta misma lacra, con un titular y un suplente. El servicio se extiende más allá del núcleo urbano con el turno de pedanías, donde los letrados se desplazan en su propio vehículo por todo el partido judicial a disposición de la Guardia Civil y policías locales. Para los casos de extranjería, como la llegada de pateras, no hay una guardia fija, sino un sistema de lista corrida que moviliza a múltiples abogados a través de una centralita. "Si llega una patera con 60 personas, un abogado no se puede hacer cargo de todo eso", detalla Cubillas. Aunque se espera una noche tranquila, Cubillas admite que "los días señalados suelen tener su problemática especial". La combinación de alcohol o con otras sustancias y las multitudes puede dar lugar a riñas y peleas. El responsable del turno de oficio señala que, desgraciadamente, las relaciones familiares combinadas con el alcohol pueden derivar en conflictos que acaban con detenidos y víctimas. Los letrados de guardia pueden estar cenando en casa y tomándose las uvas con sus familias, pero deben estar listos para actuar en cualquier momento. La llamada puede llegar "en Reyes, en Cabalgata, en Semana Santa, en Nochebuena, en Nochevieja", como cualquier otro día, recuerda Cubillas. Reconoce que "lo peor podría ser que te llamaran antes de esas uvas" y no poder tomarlas por estar prestando el servicio. José Manuel Cubillas ha querido enviar un recuerdo a todos los profesionales que prestan un servicio a la comunidad durante esta noche, especialmente a sus compañeros y compañeras que estarán ahí dando el callo. Esta labor esencial, a menudo poco valorada, se realiza mientras persisten las reivindicaciones del sector para equiparar la remuneración a la de otras comunidades autónomas por el mismo trabajo.