Fin del ciclo ganador: América cierra 2025 volando bajo

El 1 de enero de 2025 el americanismo amanecía rebosante, presumía un tricampeonato histórico ganado con todas las de la ley. Nadie podía rebatir que se jactaran de ser el equipo más grande, el más ganador y el mejor club del futbol mexicano cuando llevaban un año y medio gobernando la Liga Mx a punta de campeonatos.El proyecto fluía y había más hambre, se mantenía la exigencia de alargar el ciclo, pero se puso énfasis en un aspecto estratégico: consolidar el club en el panorama internacional. El pedido fue claro y vino desde los despachos más importantes, se tenía que ganar la Champions Cup de la Concacaf, un torneo que permitiría al club exponer su imagen en la Copa Intercontinental y asegurar un boleto al Mundial de Clubes de 2029.​Con el paso del tiempo y de los juegos, la dinámica de América no era la misma, sí, mantenía el tono competitivo y era un equipo reconocible, pero el juego no era el de tiempos pasados, empezó a dar evidente que la curva de rendimiento empezaba a tocar el punto descendente, aunque desde el club, el cuerpo técnico y en el vestuario se hacía el esfuerzo por no decaer, muy pronto llegó el punto de quiebre y fue uno que dolió sobremanera porque tuvo un impacto tanto deportivo como emocional y económico. El equipo que se levantó con puño de hierro en el 2024, comenzó a vivir la cara de la amargura, esa que tanto desquicia a todos los estamentos del club.De la gloria al purgatorioA finales del mes de marzo todo iba a pedir de boca, se había eliminado a Chivas en los octavos de final de la Champions Cup de la Concacaf y el equipo cerraba el trimestre siendo líder general del torneo casero. Fue el martes 8 de abril cuando la historia del conjunto americanista empezó a escribirse de manera negativa. Equipo de André Jardine perdió 2-1 el juego de vuelta de los cuartos de final de la Champions Cup frente a Cruz Azul, en el Estadio Olímpico Universitario, a las Águilas de les escapaba el título que el dueño había marcado como prioridad, fue un triple golpe porque se perdió Concacaf, no se fue a la Intercontinental y tampoco se aseguró el Mundial de Clubes.A partir de ahí la moral del equipo empezó a decaer, aunque hubo la conjura de pelear por el tetracampeonato.El equipo mantuvo el tono, pero empezó a notar una baja de juego en futbolistas clave, sobre todo Henry Martín, el capitán no pudo estar en su mejor versión como otros jugadores más. El resultado: se perdió la Final ante Toluca, más allá de haber logrado lo que nadie ha podido como llegar a cuatro finales consecutivas, el hecho de perder no gusta en esta institución.El acabose llegó cuando una semana despuésse perdió la posibilidad de asistir al Mundial de Clubes en un repechaje que se jugó contra el LAFC, de nueva cuenta se le fue al América la palestra internacional y también una gran suma económica porque hubiera recibido de la FIFA por lo menos 9 millones de dólares. El ciclo ganador se había terminado.Para el Apertura 2025 tocó la introspección, momentos en los que hubo que meditar, entender que el club debía reinventarse en lo futbolístico y lo emocional, se apeló al espíritu competitivo de siempre, hubo refuerzos como Raúl Zúñiga y Allan Saint-Maximin que parecieron darle otra fisonomía, pero se volvió a caer con Toluca en el Campeón de Campeones. Luego vino la Leagues Cup, y en el nuevo formato del torneo entre la la Liga MX y la MLS no pudo avanzar a la siguiente fase, una situación que no está a la altura de un club como el América.La curva de rendimiento siguió a la baja a lo largo del torneo, las lesiones se hicieron más constantes, al igual que las bajas de juego; si el éxito del tricampeonato se dio por una inercia en la que el rendimiento de la mayoría del plantel fue constante, ahora se vivía en un estado de irregularidad.Accedieron a la Liguilla como el cuarto mejor equipo del torneo, algo positivo, salieron de la fiesta grande en las primeras de cambio, con un gol en tiempo de compensación en el juego de vuelta de los cuartos de final contra Monterrey, en una acción mal defendida por todo el equipo.Ahí acabó el año futbolístico de las Águilas, el 2025 tenía pinta de histórico, y lo fue a la inversa, porque las vitrinas acabaron vacías.El Club América tuvo seis frentes abiertos y en ninguno trascendió; para el 2026 no puede permitirse algo similar.ZZM