Alberto Chicote se cuela una vez más en las televisiones de toda España este miércoles, 31 de diciembre. Y es que ya es tradición que el famoso chef presente las Campanadas de fin de año de Antena 3 . Y lo hace, por décima vez, junto a su inseparable Cristina Pedroche , con quien dará la bienvenida al 2026. El madrileño, de 56 años , se ha convertido en uno de los cocineros más mediáticos gracias a programas de televisión como 'Pesadilla en la cocina' , ¿Te lo vas a comer? y 'Top Chef'. Todos ellos giran en torno a su gran pasión: la gastronomía . A Chicote siempre le ha interesado la cocina. De hecho, con tan solo 17 años comenzó sus estudios en la Escuela Superior de Hostelería y Turismo de Madrid . En la década de los 90 trabajó en prestigiosos restaurantes ubicados tanto en la capital como en otras ciudades del país. Además, estuvo durante una temporada en Suiza para ampliar allí su formación como cocinero. A partir de ahí, su carrera solo hizo que ir para arriba. En 1999, se convirtió en el chef de Nodo . Chicote tenía por delante el gran reto de combinar los productos españoles con los japoneses para elaborar platos únicos. Y lo superó con creces, pues se convirtió en uno de los pioneros de la cocina de fusión . Su trayectoria profesional es, sin duda, de lo más envidiable. Con esfuerzo, trabajo y sacrificio, ha logrado conseguir cosas inimaginables. Pero, ¿cómo es Chicote en su día a día? Conocemos el lado más personal del chef. Alberto Chicote siempre ha sido un apasionado del deporte, concretamente del rugby . Lo cierto es que no se le daba nada mal. Llegó a formar parte de la selección madrileña de rugby . Lo más curioso es que allí conoció al actor Javier Bardem , quien también fue jugador. A los 20 años decidió abandonar esta actividad para centrarse por completo en el mundo de la cocina. Antes de conocer a su actual mujer, Alberto Chicote estuvo casado. El chef no ha hablado mucho de esta etapa, ya que la recuerda con dolor, especialmente durante el divorcio . Sin embargo, una nueva oportunidad en el amor llegó para el madrileño. En 2004, conoció a Inma Núñez . Ella era jefa de sala del restaurante Nodo. Ambos comparten trabajo y afición . Juntos abrieron Omeraki , cuya carta se centra en productos de temporada y en una reinterpretación personal de la cocina. Es, para muchos, uno de los mejores restaurantes del país. Finalmente, en septiembre de 2022, Chicote y Núñez se casaron . Fue una ceremonia íntima a la que acudieron familiares y algunos compañeros de televisión como Dani Rovira, Susanna Griso y Roberto Leal. Desde entonces, el chef reconoce que Inma ha sido un pilar fundamental en su vida . «Es mi compañera de viaje de los últimos 17 años», confesó hace unos meses en el pódcast 'Tengo un plan' . «Desde entonces, no me ha acompañado, es quien me ha dirigido», dijo el cocinero, asegurando que Inma es «la persona en la más confía del mundo» . «Yo no creo que me entienda, es que es igual o peor. No sabe estar quieta un minuto, es un culo inquietísimo. Le encanta construir, le encanta saber que aquello que hace sirve para algo», añadió, sobre la faceta más profesional de su esposa. Alberto Chicote no tiene hijos biológicos . No obstante, Inma Núñez sí fue madre a raíz de una relación anterior. Ahora, sus 'pequeños' ya se han hecho mayores y han labrado su propio camino. Uno de ellos ha tenido un hijo, Hugo . Por lo tanto, es el nieto de Inma, aunque Chicote también lo considera como tal. «Yo digo siempre que no tuve hijos, pero tengo un nieto» , le contó a Mariló Montero en laSexta. Chicote fue diagnosticado de una enfermedad que ha supuesto un antes y un después en su vida. El chef recibió la noticia de que tenía diabetes tipo 2 . Esta afección le ha obligado a seguir una alimentación saludable y una rutina de ejercicio estricta. «Lo llevo todo lo bien que se puede llevar. Lo tengo más fácil que otros diabéticos porque tengo el recurso de cocinar de muchas maneras», declaró. Antes de este bache, el cocinero ya fue consciente de que debía hacer un cambio en su dieta . El madrileño consiguió adelgazar casi 40 kilos . «Me he tirado muchos años con sobrepeso, estaba en 115 kilos», lamentó.