El centro recuerda que los responsables se enfrentan un delito penal contra la salud pública por tener a estos animales fuera de espacios autorizados Así es Candela, el primer pollo de quebrantahuesos que sobrevive en Cantabria en 69 años Sigue la búsqueda de la familia de monos Tití de Pincel , de los que no se tiene noticias desde el pasado fin semana, cuando un grupo de personas entraron por la noche a las instalaciones del zoológico MundoPark de Guillena ( Sevilla ) y se los llevaron por la fuerza, con el objetivo de comercializar con ellos, según denuncia la dirección. El centro ha denunciado el suceso y pide colaboración a la ciudadanía para que comunique cualquier dato relevante. A través de sus redes sociales, la dirección informó que los ladrones “entraron sin piedad” de madrugada y rompieron las instalaciones donde descansaban para llevárselos por la fuerza. “Seguramente con el fin de comerciar con ellos”, lamenta el responsable del parque, Juan Luis Malpartida. El centro ha denunciado ante las autoridades el robo de esta familia de monos Tití de Pincel, una especie endémica de los bosques del oriente de Brasil, que puede medir entre 18 y 25 centímetros de longitud. De hecho, la policía ya revisa las huellas dactilares y las cámaras del recinto , pero es importante para los animales que sean recuperados cuando antes. Localizar a esta familia de simios es fundamental, tanto para los ejemplares extraviados como para el único que quedó en las instalaciones del zoológico MundoPark, que “se encuentra muy asustado y traumatizado por el robo de su familia ”. Y desde el zoológico piden colaboración ciudadana: “Si alguien puede tener alguna pista de dónde pueden estar , si les han ofrecido su venta, o quien puede haberlos robado, por favor, que llamen” al teléfono de contacto. Además, aseguran que no es la primera vez que sufren robos o intentos de este tipo. Delito castigado con penas de prisión Desde las redes sociales del centro, Malpartida hace un llamamiento a sus captores. Les recuerda que el manejo de estos animales no es sencillo y que pueden reaccionar de manera violenta al sentirse amenazados, por lo que las consecuencias para los responsables pueden ser aún mayores e insta a evitar una “desgracia”. Además, expone que tener estos animales en casa, como seguramente esté sucediendo, está considerado un delito penal contra la salud pública , “duramente castigado con pena de prisión”. Más allá de responsabilidades penales, la dirección piensa en la situación de estos monos, que habían logrado reproducirse en cautividad en este parque sevillano: “No queremos ni pensar lo asustados que estarán” . Los responsables no tiran la toalla y tampoco pierden la esperanza de recuperar a estos animales, uno de los principales atractivos para visitantes y familias.