El día en el que 228 personas perdieron la vida por las riadas e inundaciones provocadas por la dana del pasado octubre, los servicios de emergencias estaban totalmente desbordados sin ser capaces de responder a todas las llamadas. Según un informe remitido al Juzgado de Instrucción de Catarroja, que investiga la gestión de la catástrofe, el sistema registró un total de 19.821 llamadas a lo largo del día, de las cuales 8.290 no llegaron a ser atendidas. El documento, elaborado por la Subdirección General de Emergencias de la Generalitat Valenciana, señala que el momento más crítico se produjo a las 17:00 horas, cuando se intentaron realizar 2.438 llamadas en tan solo una hora. Esta saturación provocó que miles de ciudadanos no pudieran establecer contacto con el servicio de emergencias mientras se sucedían inundaciones, rescates y situaciones límite en distintos municipios de la comunidad. Del total de llamadas registradas, 9.605 fueron atendidas correctamente, mientras que 5.832 quedaron sin respuesta tras más de 10 segundos de espera y 2.458 se cortaron antes de ese tiempo, ya fuera por decisión del propio llamante o por interrupciones en la conexión. Además, otras 1.926 llamadas, que inicialmente no fueron respondidas, lograron ser atendidas en intentos posteriores. El número de incidentes gestionados, que puede corresponder a una o varias llamadas distintas, fue de 4.770. La evolución horaria de las llamadas a lo largo del día da su comienzo a partir de las 15:00 horas, cuando se empezó a notar un fuerte repunte en la actividad, con 1.462 llamadas registradas. A las 16:00 ya eran 1.833, y a las 17:00 se alcanzó el máximo de 2.438. La presión disminuyó ligeramente en la siguiente hora, con 1.439 llamadas a las 18:00, y continuó descendiendo: 1.066 a las 19:00; 1.539 a las 20:00; 1.058 a las 21:00; 1.019 a las 22:00 y 1.020 a las 23:00 horas. En cuanto a la trazabilidad de las llamadas, el sistema 112 Comunitat Valenciana solo registra datos geográficos y de contenido (no grabaciones) de aquellas llamadas que logran ser atendidas, por lo que no se dispone de información sobre el origen ni la naturaleza de las llamadas perdidas. Además, el desvío automático de llamadas a otros centros 112 del Estado español es gestionado exclusivamente por las operadoras telefónicas. En caso de saturación de los canales del 112 valenciano, algunas compañías remiten la llamada a otro centro de emergencias, mientras que otras emiten mensajes de error o simplemente no entregan la llamada. Este funcionamiento, según el informe, es completamente ajeno al control del 112 de la Comunitat Valenciana. Asimismo, se indica que una llamada que logra entrar en el sistema no se redirige nunca automáticamente a otro 112 de otra comunidad autónoma. Solo si el centro que la recibe lo considera necesario, puede transferirla de forma manual al número principal del 112 valenciano. Paralelamente, la jueza Nuria Ruiz Tobarra ha solicitado también información al Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia sobre los rescates realizados durante esa jornada. En un informe elaborado por el inspector...