En España todavía quedan más de 3.000 pasos a nivel sobre vías férreas, 57 en Salamanca. De esos 57, solo tres cuentan con barreras. El resto tienen luces intermitentes o señales acústicas avisando de que se aproxima un tren. La verdad es que es todo un anacronismo del siglo XXI la existencia de estas intersecciones entre las que se entrecruzan raíles y carreteras. Uno de los pasos a nivel que existen en Salamanca lo encontramos en Babilafuente. Aquí tanto su Ayuntamiento como sus vecinos piden día tras día su eliminación, pero claro; el coste para hacerlo no es barato. Existe, desde hace más de 10 años, un proyecto para eliminarlo pero nadie coge el toro por los cuernos. Bueno más bien el Ministerio de Transportes del Gobierno de España hace oídos sordos; mientras la Junta de Castilla y León ha intermediado para que se suprima. De hecho, en la reunión en 2024 entre el presidente de la Junta de Castilla y León Alfonso Fernández Mañueco y el presidente del Gobierno Pedro Sánchez se puso sobre la mesa la necesidad de eliminar este paso a nivel. "Nada se ha hecho, no hay noticias y seguimos esperando" ha contado en COPE Salamanca la alcaldesa de Babilafuente Carmen García. Los vecinos y también los conductores que transitan por esa zona claman por que se tome una solución. "Es un paso con mucho tráfico. La carretera une a varios pueblos de Las Villas en la provincia salmantina que toman esta vía para poder acceder a la autovía; a mayores, existe también mucho tráfico pesado procedente por las pequeñas empresas asentadas en los alrededores", nos dice la alcaldesa. A día de hoy, las barreras funcionan perfectamente y se bajan con tiempo para que el tráfico se detenga y permita que pase el tren. "Otra cosa es aquel que viene con prisa y cree que va a poder pasar la barrera y finalmente lo que ocurre es que o se la lleva por delante o le raspa el vehículo". Reconoce la alcaldesa del municipio que la Guardia Civil vigila muy a menudo el lugar para evitar este tipo de incidentes que ponen en peligro a los conductores. Cierto es que, a veces, hay que tener mucha paciencia. Imagina tienes prisa y te toca la barrera bajada. Pues, en ocasiones, se ha formado una fila de vehículos impresionante porque la barrera no se ha levantado hasta veinte minutos después tras pasar el tren. Hay quejas porque la gente pierde mucho tiempo y no te quiero ni contar si es una ambulancia y lleva una urgencia. "La solución es coger otra carretera, la de Aldealengua; aunque supone un desvío y hacer más kilómetros te aseguras que el paso a nivel no va a parar el vehículo", remarca la alcaldesa. La realidad es que la situación en este paso a nivel es complicada y se sigue reclamando una solución para esta histórica reclamación. Esperemos que más pronto que tarde se termine con este paso a nivel por el que cruzan vehículos, peatones y trenes.