El barrio de Santa María de Lorca contará en 2026 con una gran zona verde de más de 3.000 metros cuadrados ubicada junto a los antiguos depósitos de agua de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, que van a jugar un papel clave en el mantenimiento de ese espacio a través del agua de lluvia. El Ayuntamiento comenzará las obras, con un presupuesto de casi 840.000 euros, antes de fin de año, con un plazo de ejecución de ocho meses, como parte del proyecto europeo NatUR-W centrado en el aprovechamiento del agua pluvial. Los viejos depósitos, cedidos por Canales del Taibilla, se usarán como centro captación, almacenamiento y distribución de agua de lluvia, en un circuito cerrado que se completará con la instalación de un biofiltro junto a la antigua cárcel, ya que la iniciativa europea forma parte del proyecto para su puesta en valor. Este biofiltro recogerá y depurará el agua pluvial, que luego será llevada hasta el depósito rehabilitado para ser empleada en el nuevo espacio verde, garantizando así el riego del parque de forma autónoma y eficiente. La zona, que ahora está muy degradada, se convertirá en un espacio renaturalizado que aspira a convertirse en un pulmón verde para los barrios altos y en una nueva zona de esparcimiento para los lorquinos.