El colectivo sociocultural Nodo Corduba denuncia los hechos y la falta de señalización adecuada con información sobre el horario de cierre de los recintos Rescatan a un turista que se quedó encerrado en el Museo Arqueológico El colectivo sociocultural Nodo Corduba ha denunciado que un nuevo turista se haya quedado encerrado en un monumento “por la falta de una señalética adecuada que aporte información vital y básica al visitante, como dónde se encuentra y a que hora cierran los recintos”. En esta ocasión ha sido en el Zoco de la Judería, en el corazón del Casco Histórico, según ha informado en un comunicado. El Zoco, según ha recordado Manuel Ortega, portavoz de Nodo Corduba, es un espacio gestionado por artesanos, con unos horarios de apertura y cierre, y, aunque los guías turísticos informan, “allí no hay ningún cartel concreto que informe al respecto para que las personas que están disfrutando de un lugar agradable, de calma y solaz, con una colonia de gatos controlada para quienes les gusten estos animales, sepan a qué atenerse”. Indica que el visitante en cuestión “estaba tan ensimismado” con el Zoco que no se dio cuenta de que los pocos artesanos que aún quedan allí se marchaban cerrando la puerta tras de sí. Se trata de hechos puntuales, aunque no hace mucho se quedó otro turista encerrado en El Alcázar, y “sería conveniente que el gobierno municipal se tomara más en serio el turismo, que dejara de hacer tantos viajes a países extranjeros para promocionar la marca Córdoba y se centrara más en la ciudad con una señalética adecuada, actualizada y bien visible, que indicara los grandes hitos patrimoniales de la ciudad, con su código QR incluido, y que informara a los turistas dónde se encuentran, cuánto tiempo pueden estar y cuándo cierran”, apunta Ortega. Restos en la Ronda Norte En ese sentido, indica que se trata de algo que “sirve para todo el año y no únicamente para las temporadas turísticas”. Y es que Córdoba es una ciudad-yacimiento, tal y como la han calificado catedráticos de la Facultad de Historia de la UCO, porque en cualquier sitio en el que se mueva tierra aparecen restos arqueológicos de importancia, como el que ha tenido lugar en la Ronda Norte. “Lo que se ha descubierto allí no es cualquier cosa”, ha advertido el portavoz del colectivo, pero “puede correr el riesgo de que sea desmantelado, trasladado a otro sitio o simplemente laminado”. A juicio de Ortega, “en caso de que ese conjunto monacal mozárabe no se excave más implica que puede acabar siendo destrozado”. “De hecho, en las obras de esa Ronda Norte no se está excavando más y se debería, a la vista de lo que ha encontrado, y nos podemos encontrar con otro suceso similar al de Cercadilla o con lo que sucedió en el Bulevar Gran Capitán, donde se destrozaron bastantes restos arqueológicos importantes y se quedaron finalmente bajo tierra sin oportunidad de verlos aunque fuera mediante un suelo transparente”. Pero para que Córdoba sea de verdad una ciudad yacimiento requiere de inversiones y una estructura que garantice que esa realidad pase a ser riqueza patrimonial, social, de empleo y dinamización de la ciudad. “Si no se hace es grave, pero que ni siquiera haya lo más mínimo, que es una señalética en condiciones para evitar tener a nuestros turistas encerrados como animales de zoo es más grave aun por ser lo básico”, ha denunciado. Para Nodo Corduba, negarse a instalar esa señalética demostraría “aún más” el grado de desinterés del equipo de gobierno local actual, “mientras se le aumenta a la concejala de Turismo la asignación para promocionar la ciudad fuera, atraer a más turistas y que más gente pueda acabar quedándose encerrada”.