Las carreteras CO-3402 y CO-3314, cortadas desde la tarde del martes debido al incendio forestal declarado en la sierra de Córdoba, ya están reabiertas al tráfico después de que el fuego haya sido dado por estabilizado por el operativo del Plan Infoca. La normalidad regresa poco a poco a la zona tras más de 24 horas de tensión, desalojos y un gran despliegue de medios humanos y técnicos para contener las llamas. El incendio se originó en torno a las siete de la tarde del martes 22 de julio, en una cuneta próxima a la carretera CO-3402, en el entorno del Castillo de la Albaida. Las condiciones meteorológicas —altas temperaturas, viento y escasa humedad— favorecieron la propagación del fuego, que obligó a decretar la fase 1 del Plan de Emergencia por Incendios Forestales de Andalucía. Más de 500 personas fueron evacuadas por precaución, entre ellas los residentes de 60 viviendas en la urbanización Santa Ana de Albaida, otras 30 en la Cuesta del Reventón y 12 en la zona del Patriarca, además de los ocupantes del hotel Castillo Albaida y del club social Vista Sierra. Durante toda la jornada del miércoles, los equipos de emergencias han trabajado sin descanso para enfriar los puntos calientes, vigilar posibles reactivaciones y garantizar la seguridad del entorno. A última hora de la tarde, el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, anunciaba la desactivación de la fase de emergencia y el paso a la fase de preemergencia 0, al quedar el incendio bajo control. Esta decisión ha permitido también la reapertura de las vías cortadas, lo que supone un alivio para los vecinos y para la movilidad en esta zona periurbana de la capital cordobesa. El Plan Infoca ha movilizado más de 200 efectivos, entre ellos bomberos forestales, agentes de Medio Ambiente, técnicos de operaciones, Protección Civil, Policía Local, y voluntariado. También han participado cuatro autobombas y dos helicópteros que trabajaron hasta el anochecer del martes. El trabajo conjunto ha sido clave para frenar el avance de las llamas en una zona especialmente sensible por la cercanía de núcleos habitados y equipamientos turísticos. Según los primeros cálculos, el incendio ha afectado a unas 84 hectáreas de vegetación. A pesar de ello, no ha habido que lamentar daños personales ni en viviendas. Solo ocho personas pasaron la noche fuera de sus casas en un hotel de la ciudad, y una familia fue alojada en el centro municipal de emergencia habitacional, donde también han recibido apoyo otras personas para recoger enseres, medicinas o atender a sus animales domésticos. El Ayuntamiento de Córdoba ha mantenido durante todo el operativo su Plan Territorial de Emergencias Local, y habilitó un punto de información para afectados en la glorieta Rafael Rivas Gómez. Los servicios sociales y la Policía Local han estado en contacto con las familias evacuadas para ofrecerles acompañamiento y asistencia en lo necesario. El alcalde de Córdoba, que visitó el Puesto de Mando Avanzado, ha agradecido el esfuerzo de todos los operativos y la colaboración ciudadana. “Ha sido una situación complicada, pero gracias a la rápida intervención y a la coordinación de los equipos, se ha logrado evitar una tragedia mayor”, ha subrayado. Aunque el fuego está estabilizado, el operativo continúa sobre el terreno para evitar reproducciones. La vigilancia se mantendrá activa durante los próximos días hasta que se declare la extinción total del incendio. La prioridad ahora es consolidar el perímetro y evaluar los daños ambientales en la zona afectada.