El Gobierno de España invertirá 1.500 millones de euros en el Aeropuerto de Málaga y ampliará su capacidad hasta los 36 millones de pasajeros. Además, la superficie actual del área terminal pasaría de 80.000 metros cuadrados a 140.000 y prácticamente se "duplicaría", según recalcó en Málaga el ministro de Transportes, Óscar Puente, al destacar que las actuaciones proyectadas mejorará la experiencia del viajero en estas instalaciones aeroportuarias.