El templo prehistórico de Santa Verna lucha por sobrevivir mientras avanzan las excavadoras en Gozo

Conflicto - Aunque las autoridades negaron la presencia de restos importantes, los hallazgos realizados por los propios vecinos y las denuncias de asociaciones como FAA han puesto en duda la gestión del área y las licencias concedidas ¿Cómo llegó un templo egipcio al corazón de Madrid? La historia detrás del Templo de Debod El paso de las excavadoras ha sido constante. Las vibraciones han alcanzado zonas sensibles y el polvo ha cubierto fragmentos que todavía no han sido catalogados. En paralelo, los informes técnicos se acumulan en despachos sin que nadie marque una directriz clara. La amenaza no ha sido repentina, pero se ha acelerado. La lucha a contrarreloj para preservar el yacimiento de Santa Verna , que consta de tres bloques de piedra, ha entrado en una fase crítica. Las primeras intervenciones arqueológicas se remontan a 1908, cuando el arqueólogo Themistocles Zammit localizó restos de un templo con forma trebolada en la localidad de Xagħra , al norte de la isla maltesa de Gozo. Tres años más tarde, en 1911, la investigación se amplió y permitió descubrir dos esqueletos humanos , lo que reforzó la hipótesis de que el lugar pudo utilizarse con fines funerarios. Santa Verna reúne vestigios de todas las fases del Neolítico maltés A partir de entonces, el sitio fue ganando relevancia dentro del estudio de la prehistoria maltesa, al abarcar todas las fases del Neolítico insular. La secuencia cronológica se extiende desde el periodo Għar Dalam hasta el Tarxien , con evidencias de ocupación que datan del quinto milenio antes de nuestra era. Las excavaciones más completas se llevaron a cabo entre 1987 y 2015, gracias a una colaboración entre entidades locales y proyectos europeos como FRAGSUS. Los arqueólogos documentaron pavimentos poligonales tallados en piedra de globigerina, suelos de hormigón de cal y una estratigrafía intacta que ha sido clave para reconstruir la evolución arquitectónica del templo. En esa misma campaña se hallaron también figurillas con forma de caracol y fragmentos de cerámica correspondientes a los periodos Skorba y Żebbuġ , lo que sugiere una ocupación prolongada con funciones que fueron adaptándose con el tiempo. La falta de control institucional genera tensiones en torno al patrimonio de Santa Verna En el año 2015, un equipo liderado por la Universidad de Cambridge localizó huesos de animales y muestras ambientales que confirmaban la existencia de actividad agrícola y ganadera anterior a la construcción del templo. La presencia de capas de ocupación más antiguas refuerza la idea de que Santa Verna se edificó sobre un asentamiento previo. Según los informes del FRAGSUS Project, esta superposición cronológica ofrece una oportunidad única para estudiar la transición entre comunidades recolectoras y sociedades agrarias en el Mediterráneo central. La presión ciudadana busca paralizar las obras y blindar el entorno Pese al valor arqueológico del enclave, las obras de urbanización no se han detenido . A finales de 2023, la Superintendencia del Patrimonio Cultural de Malta aseguró que las zonas en cuestión no contenían elementos relevantes . Esa afirmación quedó en entredicho tras el hallazgo de restos humanos por parte de residentes del área. La organización Flimkien Għall-Ambjent Aħjar (FAA) , dedicada a la protección del patrimonio natural y cultural, ha denunciado la pasividad institucional ante una situación que califica de alarmante. Ante ese contexto, la portavoz de la FAA explicó en declaraciones recogidas por el Times of Malta que “usar maquinaria pesada cerca de depósitos arqueológicos, desechar restos humanos y carecer de seguimiento científico refleja una actitud de abandono cultural”. La asociación exige una moratoria inmediata sobre cualquier intervención en los alrededores del templo, así como la revisión de las licencias urbanísticas concedidas en la zona. Los arqueólogos que han trabajado en el lugar insisten en que el yacimiento no debe quedar fuera de las prioridades internacionales . Además de su cercanía con el complejo megalítico de Ġgantija, que forma parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO, Santa Verna representa una pieza clave para entender las prácticas espirituales, sociales y constructivas de las primeras comunidades agrícolas del archipiélago. La diferencia es que, en este caso, la falta de visibilidad ha jugado en contra . El papel de Santa Verna en la historia antigua sigue sin el reconocimiento merecido FAA ha reclamado públicamente que se incluya a Santa Verna en la lista indicativa de sitios candidatos a patrimonio mundial , algo que hasta ahora no se ha producido. El colectivo también ha propuesto una reforma legal que limite cualquier tipo de edificación a menos de 200 metros de yacimientos catalogados. El objetivo es impedir que las actuaciones se produzcan sin análisis previos y obligar a las constructoras a contratar personal arqueológico cualificado. En paralelo, varios académicos han pedido campañas educativas para sensibilizar a la población sobre la importancia del patrimonio prehistórico. La falta de conocimiento sobre el valor de enclaves como Santa Verna puede favorecer su deterioro, incluso aunque existan leyes que lo protejan. Esa doble amenaza , burocrática y social, complica aún más la preservación de un lugar que acumula más de 7.000 años de historia . Por el momento, el muro que separa el templo de las obras sigue levantado, pero nadie ha confirmado que sea definitivo.