El país más facha del mundo

Perdonad que insista pero es que desde que leí lo de la ordinalidad me cuesta conciliar el sueño y poco a poco voy entendiendo por qué. Ordinalidad comparte campo semántico con orden, ordenanza, quizás ordinariez, y mi natural antijerárquico lo acepta mal, se me atraviesa en la garganta cuando intento decirla. Aunque ateo, comparto educación judeocristiana y me llega el “los últimos serán los primeros”. Los últimos serán los primeros es el lema oculto de mucha gente, mucha que incluso no lo sabe, pero que nos movemos porque tenemos esa convicción secreta: cristianos viejos, esperanzados, rebeldes, fracasados, errados, mediocres, nos gusta pensar que las cosas pueden dar la vuelta, ser de otra manera, y que les puede tocar a otros o a otras, incluso a nosotros. No nos gustan las listas, ni el orden ni las órdenes, ni las etiquetas. Pregunto a amigos que saben más que yo de sistemas de financiación si existe en algún país una norma que diga que hay que hacer más inversión pública en los territorios más ricos y menos en los más pobres. Me dicen que eso no existe ni en Corea del Sur, así que creo que podemos apuntarnos ese tanto de la innovación y la globalidad y convertirnos en el país más facha del mundo, tenemos nuestras opciones porque la propuesta es muy original. La autoría del invento es catalana y eso es cool (son mucho de inventar, ya sabemos), pero no de los emergentes Alianza Catalana o los airados de Junts, sino de dos partidos de izquierda, PSC y ERC. Lo siento pero yo soy un clásico y pienso que la izquierda es solidaria y altruista y la derecha egoísta y avara, así que como inicio del relato está muy bien, rompiendo esquemas. Pero no es suficiente, hay que seguir sorprendiendo. Ya lo tengo, podríamos imaginar que la que diseña el sistema es la secretaria general de los socialistas y andaluces, las personas que menos dinero público recibirían del país si se implanta el sistema (gracias amigos socialistas catalanes por la parte que me toca). Además podríamos hacer que en su juventud ella fuera cristiana de base (mucho más judeocristiana que yo). Hay que hablar con el showrunner porque al equipo se le está yendo la mano con tanto giro de guión, eso de que al final de la película los malos son los buenos y los buenos los malos engancha, pero la verosimilitud se resiente. Ahora nos queda el asunto más espinoso, quién se presenta al premio. A mí me parece bien la plurinacionalidad y soy de respetar las autorías (por cierto, la imagen que ilustra estas letras es de Iago Ramírez), así que por ese lado le correspondería a Cataluña; pero por otra parte quien lo ejecutaría sería España. Vamos a pensarlo pero yo creo que un premio a Cataluña y España ex aequo hermanaría mucho, tras años de tantas tensiones. El país más facha del mundo. Disculpad todo esto, el insomnio.