Qué ha pasado en el Punto de Encuentro de Granada con el hijo de Juana Rivas y qué puede hacer el Estado

A pocas horas de que Daniel, el hijo menor de Juana Rivas , se vea obligado a regresar con su padre, el italiano Francesco Arcuri, la incertidumbre es total. Sobre la mesa, un cruce continuo de denuncias, decisiones judiciales de última hora y una situación que se mantiene en constante cambio. A todo ello se añade un grito de auxilio: el del pequeño que clama por, al menos, ser escuchado . La entrega al progenitor es inminente. Así lo ha decretado la jueza, quien la ha fijado para este viernes tras el intento fallido del martes. En aquel momento, el pequeño expresó entre sollozos su oposición total a volver con su padre , que en septiembre se enfrenta a un juicio por maltrato contra sus dos hijos. "Es absolutamente descartable que se emplee en la entrega del menor ningún tipo de fuerza física o coacción", concluyó entonces la magistrada. Daniel podía volver a casa con su madre, pero la tregua duraría apenas tres días. Y este viernes llega a su fin. Francesco Arcuri tiene la custodia de su hijo menor. Así lo decidió un tribunal italiano hace ahora dos años y así volvió a ratificarlo el pasado mes de febrero, después de que la Corte Suprema obligara a reconsiderar aquella decisión. El italiano tiene la custodia a pesar de enfrentarse a un juicio por la vía penal , acusado de maltrato a sus dos hijos. Arcuri se sentará en el banquillo de la justicia italiana el próximo 18 de septiembre . La Fiscalía de Cagliari (Cerdeña) lo señala por presuntamente insultar, castigar, vejar y golpear a sus hijos de forma reiterada. Tiene, además, una condena por malos tratos. Pero la justicia considera que está en condiciones de cuidar a su hijo menor. Lo hace también a pesar de la oposición del hermano del menor, Gabriel. Desde que cumplió la mayoría de edad, el joven ha expresado en diversas ocasiones la violencia ejercida por su padre y el riesgo que corre su hermano si regresa con él. Este jueves, el mayor de los hermanos firmó una misiva dirigida a las autoridades españolas, en la que recuerda que hace ahora ocho años tuvo que convivir con su padre por imposición judicial: "No se defendieron mis derechos, no me escucharon y me entregaron a él". Narra lo que a partir de ese momento fueron "cinco años de abuso y maltrato ". Hoy, exclama el chico, su hermano pequeño "desea ser escuchado aquí y ahora". El mismo día, Gabriel presentó, además, una querella contra su padre y contra la psicóloga Pilar Díaz por haber presuntamente coaccionado a su hermano el pasado martes, en el punto de encuentro donde iba a ser entregado, tratando de imponer su vuelta a suelo italiano. Daniel fue sometido, según su relato de los hechos, a un " durísimo interrogatorio en el que le conminaba a volver con su padre, pese a que este había expresado claramente su voluntad de no hacerlo". En paralelo a la citada querella, el mismo viernes trascendió otra decisión judicial. Esta vez, procedente de la Audiencia Provincial de Granada: Juana Rivas será investigada por sustracción de menores . En un auto al que ha podido acceder infoLibre , los jueces admiten parcialmente el recurso presentado por Francesco Arcuri contra el archivo de la denuncia en la que acusaba a su expareja de este delito. Los magistrados señalan que la madre de Maracena (Granada) ha persistido en "retener a su hijo menor", incumpliendo el mandato de la justicia italiana, una conducta que el tribunal cataloga como grave. La Audiencia de Granada llega a resaltar incluso que, según la Corte de Apelación de Cagliari, la denunciada "podría haber buscado intencionadamente el dictado de la medida cautelar" por la que un juzgado de guardia permitió en enero que el menor de sus hijos se quedara a su lado de forma provisional y tras haberle escuchado en sede judicial. Rivas fue condenada por sustracción de menores hace siete años e indultada parcialmente después. Mientras el tiempo corre, no sólo la madre granadina mira con inquietud el reloj. La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, remitió este jueves un nuevo oficio a la Fiscalía General del Estado, tras haber recibido un informe que describe hechos de "extrema gravedad" en el punto de encuentro familiar, sucedidos el pasado martes. En ese informe, al que también ha podido acceder infoLibre , la psicóloga que acompañó al menor señala que el pequeño expresó que "no se quería ir" y verbalizó "su temor a que le matara [su padre] si volvía". La profesional denuncia que fue separada del menor, quien pasó horas en una sala con una psicóloga "traída por el padre", la que más tarde sería también denunciada por Gabriel, el hermano del niño. "Desde fuera de la sala se han escuchado repetidas veces las voces de Daniel pidiendo ayuda, gritando desaforadamente ", describe, pero "ninguna de las personas que estaban fuera escuchando ha hecho absolutamente nada por saber qué estaba pasando". Pasadas dos horas, continúa, la psicóloga vinculada al padre y la que pertenecía al punto de encuentro salieron para pedirle a la firmante del informe que "ayudara a que Daniel cediera en la entrega o que Gabriel abandonara la sala". El hermano mayor fue escoltado por un policía y expulsado de la sala: "El policía lo ha amenazado con que podía haber consecuencias legales para él y llevarlo detenido si se empeñaba en estar con Daniel". La psicóloga denuncia además que los responsables del punto de encuentro permitieron que el padre entrara a hablar con el pequeño, "pese a que él se ha negado en todo momento a verlo". A última hora de este jueves, según informan fuentes del Ministerio de Juventud e Infancia, la Fiscalía aseguró haber dado traslado del escrito tanto a la Fiscalía Superior de Andalucía como a la de Granada . Por otro lado, el Ayuntamiento de Maracena dirigió el miércoles un escrito al Ministerio de Justicia, solicitando su intervención ante el "riesgo grave" que recae sobre Daniel. El Ayuntamiento solicitaba una actuación urgente e inmediata por parte del departamento de Félix Bolaños en base a dos herramientas. Por un lado, el Convenio de la Haya de 1980, que regula la restitución internacional de menores y permite que las autoridades competentes puedan denegarla en casos excepcionales, como cuando esta resulte contraria al interés superior del menor. Por otro, el Reglamento de la UE 2019/1111, donde está insertada la excepción del cumplimiento de resoluciones internacionales cuando exista una vulneración de derechos fundamentales o el interés del menor lo justifique. Justicia aseguró estar "examinando detenidamente" la petición para dar respuesta antes del viernes . Y el jueves al final del día llegó la conclusión: "Los informes de Abogacía del Estado y la Dirección General de Cooperación Jurídica Internacional constatan que solo los tribunales pueden suspender la ejecución de la sentencia ". Ambos análisis, detallan fuentes del departamento, descartan "con claridad que el ministerio como autoridad central pueda adoptar ninguna decisión de un asunto judicializado que se está tramitando ante los tribunales españoles e italianos". El ministerio se compromete a estar en "todo momento en contacto con la autoridad italiana para garantizar el interés superior del niño en Italia, requiriendo información continua del estado del menor". Entretanto, Daniel suplica ayuda. Este miércoles, el pequeño escribió tres misivas dirigidas a Save The Children, Amnistía Internacional y al Comité de los Derechos del Niño. En ellas, describe los malos tratos por parte de su padre e insiste en que no desea regresar a su lado. "No quiero volver, llevo toda mi vida asustado por culpa de mi padre, que siempre me ha maltratado". "Si vuelvo con mi padre corro peligro", zanja el menor de once años.