Con el arranque del verano y las vacaciones de muchos, los retrasos en medios de transporte y las quejas por alojamientos inadecuados se han convertido en un tema candente. Esta mañana, el caso de un AVE que salió con más de una hora de retraso desde Castellón ha despertado el enfado de los viajeros, que se quejan de “una gestión deficiente de la información y falta de transparencia institucional”. Julián Tío, director de AVACU, ha ofrecido en Herrera en COPE Comunidad Valenciana una serie de consejos clave para evitar disgustos estas vacaciones. “Lo primero, siempre reclamar por escrito cuando tengamos un problema”, insiste. En el caso de retrasos en trenes, por ejemplo, recuerda que con más de 60 minutos se puede solicitar la devolución del 50% del billete, y si supera los 90 minutos, el 100%. Sobre las posibles excusas de las compañías ferroviarias, Tío es claro: “No todo vale como fuerza mayor. Las obras no son una excusa válida. Tiene que haber una emergencia de seguridad, un desastre natural o una huelga justificada”. Por tanto, ante cualquier imprevisto, insiste en que los usuarios deben dejar constancia por escrito y exigir su compensación. Pero no solo los trenes están generando problemas. En AVACU están detectando este verano un aumento en las quejas por alojamientos turísticos. “Estamos viendo muchos casos de apartamentos con humedades, persianas rotas y condiciones por debajo de lo prometido”, señala. En algunos casos incluso se han dado situaciones de “overbooking hotelero”, donde los clientes llegan y su habitación ha sido asignada a otra persona. Para prevenir este tipo de situaciones, el primer consejo es llevar siempre toda la documentación encima o accesible desde el móvil: reservas, correos electrónicos de confirmación, pólizas de seguros de viaje, etc. “Esto nos permite acreditar cualquier acuerdo y nos protege en caso de conflicto”, explica Tío. Revisar el seguro de viaje antes de salir también es crucial, especialmente si se viaja al extranjero. Muchas pólizas básicas incluyen coberturas muy limitadas, por lo que conviene considerar su ampliación si el desplazamiento lo requiere. “No nos damos cuenta de su importancia hasta que lo necesitamos”, recuerda. En caso de conflicto con una aerolínea, hotel o agencia, la vía más efectiva es dejar constancia por escrito en el momento del problema, ya sea mediante una hoja de reclamaciones en España o por correo electrónico si estamos en el extranjero. “No vale esperar a volver a casa para quejarse. Si no queda constancia, será mucho más difícil reclamar después”. Finalmente, Tío recuerda el objetivo principal del verano: “Disfrutar de las vacaciones. Si tenemos un problema, actuemos con cabeza, dejemos constancia y sigamos disfrutando. Lo importante es que nos llevemos buenos recuerdos, no disgustos”.