Ha sido un pleno extraordinario de menos de dos horas de duración que ha comenzado con la intervención del alcalde, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, para quien la forma de gestión elegida por los ciudadanos hacer seis años con Por Ávila “está dejando un nuevo modelo de ciudad”. Sánchez Cabrera ha hecho hincapié en los más de 52 millones de euros que desde 2019 Por Ávila ha invertido en la ciudad, realizando un repaso por todas las actuaciones ejecutadas en las distinta áreas. Para el regidor “estamos dando la vuelta a la ciudad”, que va a “un ritmo que no se había conocido hasta ahora”. Tras esta primera intervención del alcalde ha llegado el turno de los portavoces que, ha excepción de Por Ávila, han mostrado una visión totalmente contraria de la ciudad. José Ramón Budiño, portavoz de Por Ávila, ha reiterado el repaso realizado por el alcalde, destacando que "queda mucho por hacer y mejorar" e incluso, ha reconocido "cometer errores, porque quien actúa y toma decisiones puede equivocarse". Jorge Pato, portavoz del PP, ha realizado un repaso por los incumplimientos de Por Ávila en su programa electoral, siguiendo por “la realidad de la ciudad”. Pato se ha detenido especialmente en el acuerdo entre Por Ávila y Vox que fue decisivo para la subida de impuestos, lamentando que no se han cumplido los puntos acordados. Un pacto entre Por Ávila y Vox al que también se ha referido duramente la portavoz del PSOE, Eva Arias, quien ha reprochado a la formación de Sánchez Cabrera de emplear la “ley del mínimo esfuerzo” con su hachazo fiscal. Tras las intervenciones de PP y PSOE, la portavoz de Vox, Laura García, ha dudado si en lugar de Sánchez Cabrera es ella la alcaldesa. En todo caso García ha defendido el acuerdo alcanzado con Por Ávila “por el bien de los abulenses y los más vulnerables”. Eso sí García ha sido crítica con Por Ávila en algunos aspectos como las obras de la ciudad mal planificadas, la Zona de Bajas Emisiones, o el carril bici urbano, pidiendo de nuevo la apertura de la vía de servicio Arturo Duperier. Un debate sobre el estado de la ciudad que ha terminado igual que comenzó, con la intervención del alcalde, quién ha dudado que los portavoces de la oposición vivan en Ávila por su visión de la ciudad tan contraria a la del equipo de Gobierno. Con la legislatura a mitad de camino y a dos años de una nueva cita electoral, el regidor ha dejado sobre la mesa un compromiso: congelar las tasas e impuestos municipales.