La imagen más común que se asocia a una jornada en la playa es la del descanso: tumbonas, un buen libro y el sonido de las olas de fondo. Sin embargo no todos los planes junto al mar giran en torno al silencio y la tranquilidad. Para muchas personas, disfrutar del litoral implica también música, ambiente y la posibilidad de moverse al ritmo de una canción mientras se siente la arena bajo los pies.