Hace una semana justa, la huelga de los trabajadores de las empresas auxiliares de Navantia en Cartagena se quedó paralizada tras el compromiso adquirido por parte de la empresa. Un documento en el que se reconocía el plus del astillero. Después de 31 días de huelga, manifestaciones y piquetes por las calles y de 10 de huelga de hambre y acampada para un grupo de una veintena de ellos, veían esperanza en el calendario de negociación que debe terminar el próximo 29 de julio. Todo era alegría y esperanza, aunque lanzaban un mensaje claro y es que la huelga estaba paralizada, pero no desconvocada porque todavía no estaba conseguido el objetivo de esos 33 euros por persona al día. El plus que sí cobran en Cádiz y Ferrol. Ya han tenido lugar dos de las tres citas que estaban en ese calendario. Ni en la primera, ni tampoco en la que ha tenido lugar hoy se ha alcanzado el acuerdo y las sensaciones ya no son tan esperanzadoras. Han emitido una nota de prensa en la que se muestra cierta desconfianza antes de la última reunión fechada para el martes 29. “De nuevo suenan tambores de huelga. El pasado viernes 18 de julio se estableció, en la reunión celebrada en la OMAL, un calendario de tres días en el que se concretarían las condiciones del pre acuerdo alcanzado sobre el plus de astilleros y su implantación para conseguir la equiparación total de salarios con las empresas auxiliares de los astilleros de Navantia Ferrol y Cádiz" explica la nota. "Se ha celebrado la segunda de esas reuniones (UGT, CCOO Industria, FREMM y UEA) y la FREMM ha manifestado que los días 22 y 24 ha enviado por correo electrónico a Navantia los detalles que se solicitan por parte de los trabajadores y Navantia ha dado ‘la callada’ por respuesta. Aquí, les hemos recordado la precariedad de salarios que se están cobrando rigurosamente limitados al convenio actual. Por este motivo, los trabajadores de la Unión de Empresas Auxiliares recordamos que “la huelga no se ha desconvocado sino que está temporalmente suspendida". Temen que la estrategia retrase los posibles acuerdos hasta después del verano. "Si la estrategia es aburrirnos proponiendo el próximo martes un nuevo calendario para septiembre, de forma que pasen unas estupendas vacaciones en agosto por si decidimos desistir en nuestras peticiones les recordamos nuestro lema SOLO QUIERO MI PLUS DE ASTILLERO”. Y terminan la nota emitida con las cuestiones que se plantean tras los dos intentos fallidos. "¿Nos dejarán ya trabajar o tendremos que volver a las calles haciendo sonar los tambores de huelga por toda la ciudad? ¿No les han bastado 31 días? ¿Quieren más? Pues SI ESTO NO SE ARREGLA…¡GUERRA, GUERRA, GUERRA¡". El martes se cerrará el calendario de negociaciones pactado, pero habrá que esperar para saber si eso significa acuerdo, más tiempo o el regreso a la huelga que está suponiendo un enorme desgaste físico, anímico y económico en los trabajadores y retrasos en los proyectos por parte de la empresa.