Suele ser habitual la proliferación de incendios forestales en esta época veraniega, y no todos suelen ser provocados por el excesivo calor que existe en Verano, sino por la influencia de la mano de algunas personas que, bien por intereses personales para dejar expedita de arbolado una zona con ocultos intereses, que nunca podrán prosperar ante la imposibilidad de construir en zona donde se ha producido un incendio, o bien por ocultas razones injustificadas siempre de querer hacer daño en nuestros montes, están causando un serio daño en los bosques, y grave peligro a la población.