Las fiestas de Mezkiritz siempre han estado marcadas por una cercanía y una emoción compartida por sus cerca de ochenta habitantes y por todas aquellas personas que de una manera u otra tienen un vínculo familiar o de amistad hacia esta pequeña localidad. El buen tiempo y el excelente ambiente han acompañado durante los cuatro días de celebraciones organizadas por el Concejo de Mezkiritz y la sociedad Herriko Txoko, que ayer se despidieron dando una lección ejemplar de implicación vecinal.