Fiscalía confirma que atentados y robo de madera en el sur han mutado a extorsiones

El fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido , se refirió este viernes en entrevista con el Diario de Cooperativa al ataque armado ocurrido en Victoria que dejó a un guardia forestal asesinado. El persecutor confirmó que los atentados y el robo de madera en la zona han bajado pero el fenómeno delictual ha mutado "actuando de manera mucho más soterrada, incrementando la extorsión" , fenómeno que se ha vuelto más difícil de denunciar y perseguir. Consultado sobre por qué no se ha aplicado la Ley Antiterrorista , Garrido aclaró que esa posibilidad sigue vigente: " No hemos descartado la calificación jurídica de terrorismo hasta que no tengamos antecedentes que nos permitan saber quiénes son las personas que participaron e indagar más con las motivaciones que lo llevaron a cometer una acción de esta clase", explicó. Garrido señaló que, por ahora, no están identificados los responsables ni existe reivindicación de alguna orgánica, lo que dificulta la atribución directa a grupos que operan en la zona. "Uno puede tener hipótesis de quiénes podrían haber participado, pero lo importante es poder acreditarlas , descartar aquellas que no tienen sustento y luego, sobre la base de la evidencia, hacer la imputación y discutir ahí la calificación jurídica", puntualizó. Robo, presión a forestales o ataque directo El fiscal detalló que no se descarta ninguna línea investigativa. Entre ellas, mencionó el intento de robo de la camioneta o de equipos de seguridad de los trabajadores, acciones de presión hacia las empresas forestales o un ataque directo a los guardias. Asimismo, reconoció un patrón de ataques recientes contra trabajadores forestales, quienes han denunciado de manera informal ser víctimas de extorsión para poder continuar con sus labores. "El problema de la extorsión es que se inicia y es muy difícil de detener ", explicó Garrido. Extorsión: un delito de difícil persecución Consultado sobre si estos hechos pueden investigarse sin denuncia de las víctimas, el fiscal explicó que, aunque la mayoría de los delitos son perseguibles de oficio, la colaboración de los afectados es fundamental . "Hemos tenido casos en que incluso, tras lograr la detención de los imputados, la propia víctima cambió su versión de los hechos. Es bastante dificultoso , pero estamos para enfrentar esos desafíos, no para dejarlos de lado", dijo. El persecutor confirmó que en meses anteriores hubo hechos vinculados a daños a vehículos y a empresas forestales en el sector, pero no denuncias formales de extorsión en los términos de "páguennos o los atacamos". Finalmente, Garrido enfatizó que la investigación está declarada secreta y que hasta el momento no hay personas identificadas como sospechosas del ataque en Victoria.