Laura Toribio El regreso a clases en México es mucho más que filas en las papelerías o la emoción de estrenar cuadernos. Para millones de familias significa también un fuerte golpe al bolsillo. Este 2025, la temporada moverá alrededor de 125 mil millones de pesos, según cálculos de APPcelerate, plataforma de analítica que mide patrones de consumo. La cifra refleja todo lo que se compra: desde el paquete básico de cuadernos, lápices y juegos de geometría, hasta los uniformes, los tenis escolares y, cada vez más, las herramientas digitales que se han vuelto parte del aula. En promedio, los útiles representan entre 17% y 28% del gasto familiar; los uniformes y el calzado, hasta una quinta parte del presupuesto. Pero lo que más crece es la tecnología educativa: laptops, tabletas, celulares e impresoras, que ya concentran una cuarta parte de lo que desembolsan los hogares. 67% de los padres planea aumentar su inversión en tecnología educativa, lo que confirma una tendencia al alza en este rubro”, explicó Urtzi Elorriaga, COO de Leadgenios, al detallar que en un sólo año la proporción destinada a dispositivos pasó de 12% a 25%. Comprar aquí y allá La forma de gastar también cambió. Antes, las familias resolvían todo en una sola papelería o centro comercial; hoy se mueven entre el mostrador y el celular. Según el análisis, 73% de los consumidores en la Ciudad de México combina tiendas físicas, páginas web, aplicaciones móviles y redes sociales para equipar a sus hijos. Sólo una minoría compra exclusivamente en una papelería o tienda en línea. En términos prácticos, dice Elorriaga, el consumidor omnicanal “combina diferentes canales en su proceso de compra: compara precios en línea, consulta reseñas en redes sociales, compra algunos productos en tienda física y otros desde apps o sitios web, y aprovecha promociones o envíos a domicilio”. Muchos de los consumidores buscan en línea previo a su compra e investigan los costos antes de ir a la tienda física. En 2025, el canal preferido continúa siendo presencial, con altos porcentajes en supermercados (52%), papelerías locales (48%), tiendas especializadas (42%) y marketplaces, con 31%. Es por ello la importancia de tener estrategias de retail media que incentivan a los usuarios a la investigación y compra en sus canales físicos y digitales. Estirar el gasto La presión inflacionaria no da tregua. Cada peso cuenta, y los padres de familia lo saben. Por eso, las compras se hacen con lupa: se comparan precios, se cazan promociones, se pagan útiles a meses sin intereses o se opta por marcas más baratas. “Las familias mexicanas están buscando activamente promociones, meses sin intereses y productos sustitutos más económicos para afrontar los gastos del regreso a clases en 2025”, reconoció Elorriaga. Las ferias de descuentos, los vales escolares y hasta las presentaciones más pequeñas de algunos productos se han convertido en alternativas para cumplir con la lista sin reventar el presupuesto. Recordó que en 2023, el regreso a clases generó 108 mil 400 millones de pesos. Para el 2024–2025, actualmente en curso, la estimación es de 125 mil millones, lo que representa un incremento de 15.3% respecto al ciclo anterior. De cara al 2025–2026, la proyección es de entre 134 y 138 mil millones de pesos, con un crecimiento estimado de 10%. Más allá de los números, lo que está en juego es cómo se transforman los hábitos de consumo: cada año, más familias invierten en dispositivos y plataformas digitales. Visualizamos un regreso a clases aún más digital y personalizado. La omnicanalidad será la norma, con mayor peso del e Commerce, compras asistidas por inteligencia artificial y experiencias de compra híbridas”, anticipó. Mientras tanto, en las calles y supermercados, las escenas son las de siempre: padres haciendo cuentas con calculadora en mano, niñas y niños emocionados, y carritos de supermercado llenos de lápices, colores y tablets. Contenidos Relacionados: Saturan calles de Ciudad victoria por compras de último minuto para el regreso a clases Regreso a Clases en CDMX: 15 mil policías cuidarán a alumnos y escuelas Vales de Mercomuna, un respiro este regreso a clases en CDMX