El conjunto de saya, corpiño y mangas de la Divina Pastora de Córdoba, conocido como de las Amapolas , por la llamativa presencia de estas flores, luce como nuevo tras su restauración. Realizado a finales del siglo XIX, tiene como soporte base tejido de raso , decorado en su totalidad con una minuciosa y elaborada técnica del bordado matizado, en sedas polícromas. El convento del Santo Ángel de Capuchinos acogió el martes por la noche la presentación de la saya de las Amapolas de la Divina Pastora, que vuelve tras permanecer desde febrero en Sevilla en los talleres de Cyrta (Especialistas en la Conservación y Restauración de Tejidos Antiguos), gracias a la subvención de la Diputación de Córdoba al patrimonio cofrade. El presidente de la institución provincial, Salvador Fuentes , y especialistas de Cyrta explicaron de manera gráfica los pormenores de estas labores que se han sufragado en gran parte con 9.137 euros concedidos en la primera convocatoria de ayudas para rehabilitar este tipo de bienes a hermandades y órdenes religiosas. En este caso la cantidad la solicitó para el Redil la Fraternidad de Hermanos Capuchinos de Córdoba. Supone el 80% del total, mientras que el 20% restante lo aporta el Redil Eucarístico. El equipo de especialistas ha revertido el estado de conservación que era «muy deficiente», como apuntó a ABC Pablo Portillo, de Cyrta, porque presentaba muchas pérdidas de hilo en la urdimbe y desgarros. ¿Qué se ha hecho? Desmontaron las piezas, aspiraron para quitar la suciedad superficial, se humectó para darle flexibilidad a las fibras textiles y se alineó. La siguiente fase fue la consolidación del raso. Para realizar los puntos de restauración emplearon hilo de seda de dos cabos que tiñen previamente para que queden integrados en el conjunto. Después se encapsuló , es decir, se le aplicó un tratamiento colocando un fino tejido de tul que protege la intervención de futuros roces en la pieza, dado que está en uso, y se reforzó. Los encajes metálicos se han limpiado y colocado en su lugar. Esta saya es de las más antiguas e importantes que integran el ajuar de la Pastora de Capuchinos, según explicó la hermana mayor del Redil Eucarístico, Inmaculada Luque . Se encontraba muy deteriorada y, tras un minucioso trabajo, se ha recuperado plenamente. A juicio de Pablo Portillo, que junto con Pablo Pérez ha estado al frente del proceso, técnicamente la pieza es «muy buena, magnífica, con la técnica del pasado (como los mantones de Manila) y posee unos matices únicos al incluir amapolas blancas y rojas, y margaritas, en cuyo centro posee chenilla, que le da mucho volumen y un efecto aterciopelado, como las margaritas reales. Este prestigioso taller trabaja para cofradías de toda España y entre sus labores recientes se cuenta la recuperación del manto de la Virgen de los Dolores de los Servitas de Pozoblanco. Esta saya la lucirá el sábado 13 en la misa jubilar en la Catedral a las 18.30 horas, y a continuación se producirá la procesión triunfal de regreso a Capuchinos. Tras la presentación de este martes, la Virgen fue llevada en traslado conventual a su paso, acompañada por hermanos y devotos, con los cantos pastoreños interpretados por los directores del coro del Redil.