El Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana (CODiNuCoVa) ha presentado los resultados de su última encuesta: “¿Mengem del Territori?”. En ella han analizado los hábitos de alimentación de más de 200 familias de la Comunitat. Y, se ha revelado que 7 de cada 10 familias tienen dificultades para implementar hábitos de alimentación saludables en sus hogares y que no lo llevan a la práctica por motivos económicos. “Este proyecto nace para paliar una realidad que venimos observando desde hace años y es que los niños y niñas son la franja de edad que peor se alimenta en las familias valencianas. Además, en el estudio nutricional que realizamos entre 2022 y 2023 se demostró que el 86% de niños y niñas necesitan mejorar su alimentación”, explica María Ferrer, vocal de Educación Alimentaria del CODiNuCoVa. Para instaurar estos hábitos saludables, las familias, muchas veces se enfrentan al rechazo de los niños a probar cosas nuevas, a la falta de tiempo e incluso al hecho de evitar conflictos a la hora de las comidas. Y es que, tal y como explican las propias familias, su principal preocupación en cuanto a la alimentación de sus hijos radica en que no comen suficientes alimentos saludables como frutas, verduras o legumbres. “El 65% de los niños y niñas valencianos no llega a las recomendaciones mínimas en consumo de fruta o verdura y 1 de cada 3 excede la cantidad máxima de azúcar que es deseable consumir”, expresa la responsable de Proyectos del CODiNuCoVa, María Alonso. Otras de las preocupaciones que manifiestan los padres y madres es que sus hijos e hijas en un futuro no consigan alimentarse de manera saludable en el futuro por falta de conocimientos. Las nutricionistas han recordado que una alimentación equilibrada y saludable es la base para la prevención de enfermedades crónicas como el sobrepeso y la obesidad, la diabetes o problemas cardiovasculares que cada vez aparecen más pronto. “En nuestra Comunitat, el índice de obesidad infantil está ya en un 18% y las consecuencias de esta patología vamos a verlas a medio y largo plazo”, indica María Ferrer. El 70% de las familias asegura hacer la compra en supermercados frente a un 9,5% que la lleva a cabo en tiendas de barrio. Esto es debido a la falta de tiempo que tienen las familias que incluso, en muchas ocasiones, optan por llenar sus neveras haciendo la compra a través de Internet ya que no tienen tiempo de visitar diferentes establecimientos. Y esto también tiene un claro impacto en la alimentación de las familias. Aunque lo ideal sería tener acceso ilimitado a productos de proximidad y de temporada, hay una gran variedad de productos procesados a nuestro alcance, y por comodidad, acabamos acudiendo y comprando en estos lugares.