Arranca el nuevo curso parlamentario. Y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, han protagonizado un duro choque en la sesión de control, mostrando su total alejamiento y evidenciando la dureza de la política española. El presidente del Gobierno, ante las acusaciones de corrupción de Núñez Feijóo, ha defendido que es un Ejecutivo "limpio" y ha señalado que España está en el lado correcto de la historia. En este sentido, ha lanzado al líder popular: "Lo que está pasando en Gaza en un genocidio. Repita conmigo, es un genocidio". Estas palabras del presidente llegan después de que el Consejo de Ministros haya aprobado un plan con nueve medidas para presionar a Israel, empezando por un decreto que consolida el embargo de armas, y tras las palabras del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, negando que sea un genocidio el ataque de Benjamin Netanyahu a Gaza. El presidente del Gobierno, además, ha acusado a Núñez Feijóo de "mimetizarse" con la ultraderecha y ha lamentado que la oposición base su política en el "insulto", reprochándole al hilo que no acceda a firmar un pacto de Estado para luchar contra la emergencia climática después de los devastadores incendios que se han producido en España a lo largo del verano. El líder socialista ha criticado también que Feijóo diera "plantón" a jueces, fiscales y al rey durante la apertura del Año Judicial, poniendo también sobre la mesa que el popular ha difundido una "conversación falsa" con el jefe del Estado. Esta respuesta de Sánchez se produjo después de que el expresidente de la Xunta le lanzara la "corrupción" del Gobierno y le echara en cara que su mujer, Begoña Gómez , está "pluriimputada". Además, le ha acusado de defender a un fiscal general del Estado que está "en el banquillo" del Tribunal Supremo. Esta noticia está en proceso de ampliación