Enfermos de ELA se revindican, un año más, haciendo el Camino de Santiago

La plaza del Obradoiro volverá a ser este miércoles escenario de la llegada de una de las peregrinaciones más especiales que se realizan cada año y que tiene como protagonistas a un grupo de 13 enfermos de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) que junto con acompañantes y miembros de la Guardia Civil que les dan apoyo durante todo el Camino, volverán a reivindicarse para demostrar que, a pesar de su grave enfermedad, son capaces de superar el reto que supone para los 70 miembros del grupo, hacer el trayecto a Santiago de Compostela desde O Cebreiro por el trazado francés. Una peregrinación de CompostELA que iniciaban este pasado 4 de septiembre y que tras seis días, culminan tras realizar los más de 150 km de trazado, superando a las ya de por sí habituales dificultades del terreno como el cruce del poco accesible puente sobre el río Catasol  y de una climatología en la que la lluvia ha estado más presente que el sol, las barreras que se encuentran los pacientes de ELA con sus sillas de ruedas y las que hay también a la hora de poder alojarse en os establecimientos repartidos por el Camino. Barreras que, sin embargo, nunca han echado atrás a los participantes de CompostELA y a sus acompañantes que aprovechan también la peregrinación anual a Santiago para recordar a compañeros de otros años fallecidos. Y que en esta ocasión ha tenido un reconocimiento y recuerdo muy especial para Rosiña, miembro de honor de este grupo y recientemente fallecida por la ELA y que en colaboración con la asociación gallega de afectados de esta enfermedad incurable (AGAELA), recibía un homenaje este pasado 08 de septiembre en su localidad natal de Palas de Rei, donde los lugareños acompañaron al grupo en un acto cargado de emotividad. En palabras de una de las organizadoras de este grupo, la monfortina Mati Alvarín “el grupo CompostELA es una muestra a la sociedad de que la ELA existe, pero que no es un freno para que los afectados sigan disfrutando del bien más preciado que tiene el ser humano: la vida.” Mati sufrió la dolorosa pérdida de su gran amigo y Guardia Civil Germán Macía, al que recuerda como “una de las grandes motivaciones que tengo para formar parte de la organización de este particular y complejo peregrinaje. Me llena de orgullo que sus padres (Clari y Manolo) o su hija (Alba) vean que la figura de Germán sigue inspirando ya no sólo a mí, sino también a todo un grupo de personas que quieren mostrarle a la sociedad lo que es la ELA.” Así, la llegada a la Plaza del Obradoiro de este singular grupo de peregrinos volverá a ser una fiesta cargada de alegría, emoción y satisfacción por el objetivo cumplido. Una llegada a la que sus responsables invitan a participar a todo el que se quiera sumar, asegurando que  “La gente que nos vea entrar en el Obradoiro, nunca olvidarán ese momento”, por lo que esperan que sean muchos los que se sumen al mediodía de este miércoles, 10 de septiembre. Una llegada que este año contará además con la recepción del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, al frente de una administración que ha colaborado estrechamente con CompostELA junto con la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de la provincia de Lugo, así como otras entidades tanto públicas como privadas, además de la Guardia Civil cuyos agentes suponen un puntal donde los participantes en esta peregrinación anual encuentran el apoyo a lo largo del camino para, un año m-as, poder lograr el objetivo de ganar la Compostela y reivindicar la dignidad y atención que precisan y que siguen exigiendo los enfermos de ELA.