El derribo de drones rusos en Polonia ha encendido todas las alarmas en Europa y marcado un nuevo punto de inflexión en la guerra de Ucrania. Varsovia acusa a Moscú de una violación "deliberada" de su espacio aéreo, descarta que se trate de un error y responde invocando el artículo 4 de la OTAN, la herramienta concebida para activar consultas urgentes entre aliados cuando la integridad territorial de un Estado miembro se ve amenazada. La medida sitúa a la Alianza Atlántica en el umbral de una posible acción coordinada contra la amenaza rusa y obliga a todos los socios a debatir sobre la dimensión real de un episodio que podría redefinir el futuro del conflicto en el continente. Una "noche dramática" en Polonia El primer ministro, Donald Tusk, habló de una "noche dramática" tras convocar una reunión de urgencia con su gabinete de seguridad. Según explicó, "un gran número de drones rusos" cruzaron el espacio aéreo polaco en el marco de un ataque contra Ucrania, lo que llevó a activar los sistemas de defensa aérea. "Aquellos drones que supusieron una amenaza directa fueron derribados", detalló, antes de subrayar que el país ha superado con éxito su primera gran prueba frente a una incursión de este tipo. Las consecuencias no se hicieron esperar. El aeropuerto internacional de Varsovia y el de Lublin, en el este del país, fueron cerrados de manera preventiva, aunque con el paso de las horas han reanudado su actividad. Tusk insistió en que no existe "motivo para entrar en pánico" y descartó imponer restricciones que alteren la vida de los ciudadanos. Sí alertó, en cambio, del riesgo de "desinformación" y "propaganda hostil" que pueda acompañar al incidente. El jefe del Ejecutivo polaco insistió en que este es el primer caso en el que drones rusos son derribados sobre territorio de la OTAN, un hecho que, a su juicio, ha hecho que "todos los aliados se tomen la situación muy en serio". En su discurso, quiso enviar un mensaje de confianza en la preparación de sus Fuerzas Armadas y en la coordinación con los socios atlánticos: "Estamos listos para repeler tales provocaciones y ataques. Estamos bien preparados, la situación es grave y hoy nadie duda de que debemos prepararnos para diversos escenarios". Desde Kiev, el presidente Volodímir Zelenski corroboró que fueron ocho los drones rusos abatidos sobre Polonia y sostuvo que la operación "no fue un accidente". "Las crecientes pruebas indican que este movimiento, la dirección del ataque, no fue un accidente", señaló en un mensaje publicado en la red social X. El mandatario ucraniano ofreció cooperación inmediata a Varsovia tanto en el intercambio de información como en la construcción de un sistema conjunto de alerta y protección frente a las amenazas rusas. Zelenski recordó que Ucrania lleva meses reclamando a sus socios europeos la creación de un sistema de defensa aérea conjunta y advirtió de que la agresión rusa "representa un peligro para todas las naciones independientes de nuestra región". Según el presidente, el precedente de que...