Las banderas de los edificios de Gobierno en Estados Unidos han amanecido este jueves a media asta por la muerte del joven Charlie Kirk. A sus 31 años recibió en la tarde del miércoles un fatal disparo en el cuello mientras daba una charla sobre en la Universidad de Utah, en Salt Lake City. Estrecho colaborador de la Casa Blanca en tiempos de Trump, la esfera 'MAGA' llora la périda de su principal punto de conexión con la juventud de EE.UU. Turning Point USA, la organización fundada por Kirk con 18 años, había ortganizado el miércoles la primera parada de 'The Comeback Tour', una serie de conferencias en universidades americanas cuya primera parada fue en Utah. Rodeado de unos 3.000 asistentes, la charla había comenzado a las 12.00 p.m. locales en un formato llamado 'Prove me wrong' ('Muestra que estoy equivocado'). A las 12.10, mientras respondía una pregunta sobre tiroteos desde su tarima de orador, fue disparado en el cuello. Según informa el corresponsal en Washington de ABC, David Alandete, la Policía Universitaria admitió fallos en la seguridad del evento, a cargo del equipo privado de seguridad de Kirk más seis agentes. El joven 'influencer' fue trasladado al hospital tras el impacto. Allí se confirmó su fallecimiento. En una primera versión de los hechos, la Policía detuvo a un sospechoso en el campus, que más tarde fue liberado. Antes de confirmarse la muerte de Charlie Kirk, agentes del FBI detuvieron a otro hombre de unos 60 años en el campus de Utah Valley University, que también fue liberado y descartado al no encontrarse pruebas de su implicación en el homicidio. Las informaciones más recientes señalan como autor material a un varón vestido de oscuro, que habría disparado desde la azotea de uno de los edificios del campus, a unos 180 metros del escenario, informa Alandete. Sólo realizó un disparo, que impactó directamente en el cuello del finado. Este hombre logró escapar del lugar, probablemente gracias a la muchedumbre congregada en la Universidad, y se mantiene fugado, según la información conocida hasta el momento. «Hemos dedicado todos nuestros recursos a esta investigación, incluidos los tácticos, operativos, de investigación y de inteligencia. Para que quede claro, el FBI apoyará plenamente y codirigirá esta investigación junto con nuestros socios», explica el agente especial a cargo Robert Bohls, a través de la cuenta del FBI de x.com. Pide a la ciudadanía, además, cualquier información que pueda llevar a atrapar al culpable. A las 16:40 horas locales, el propio presidente Donald Trump es el encargado de anunciar la muerte de Kirk. Según su versión, la culpa es de la izquierda radical: «Durante años, los de la izquierda radical han comparado a estadounidenses maravillosos como Charlie con nazis y con los peores asesinos en masa y criminales del mundo». Ha asegurado que localizará «a todos y cada uno de los que contribuyeron a esta atrocidad y a otros actos de violencia política, incluidas las organizaciones que la financian y apoyan». Sin embargo, la pregunta sigue abierta: ¿quién o quiénes son sus asesinos?